El príncipe Harry todavía no ha comenzado sus vacaciones. El duque de Sussex continúa con una agenda repleta de actos.Si ayer era el turno de hacer el baile del chimpancé en una charla sobre primates, hoy ha sido la ocasión de mostrar su lado más paternal.
El marido de Meghan Markle ha realizado una visita muy especial a un hospital en el que están ingresados niños con pocos recursos económicos. El hijo del príncipe Carlos ha estado de lo más cariñoso con los pequeños y no ha dudado en jugar con ellos.
Hay dos motivos que han hecho aún más sentimental si cabe este recorrido por las instalaciones médicas. El primero es que su madre, Diana de Gales, hizo lo mismo hace aproximadamente treinta años, algo que Harry ha recordado muy emocionado viendo fotografías de aquel instante.
El otro motivo por el que este acto le ha tocado la fibra sensible es que ahora que es padre, el duque de Sussex vive de forma más intensa todos los actos que tienen que ver con los niños. Ha estado con un niño llamado Archie, como su hijo, ha bailado con la mascota del hospital, y ha dedicado palabras muy cariñosas a los pequeños que están allí ingresados.
No se ha ido con las manos vacías. Muchos de los niños han querido tener un detalle con el duque de Sussex y le han entregado regalos para su hijo Archie. Algo que a Harry le ha emocionado mucho.