El príncipe Harry ha reaparecido este martes 12 de abril. Cuando apenas quedan unos días para que vuele junto a Meghan Markle a los Países Bajos en un viaje que va a suponer un nuevo pulso a Isabel II, ya que se produce tan solo dos semanas después del homenaje al duque de Edimburgo al que decidieron no acudir, el hijo del príncipe Carlos ha dado un paso al frente.
Antes de poner un pie en La Haya, donde se va a celebrar los Juegos Invictus, el duque de Sussex ha reaparecido para presentar el acuerdo de la empresa emergente de Silicon Valley BetterUp con la fundación Invictus. Así, el príncipe Harry ha conseguido que la compañía en la que trabaje colabore con estos juegos tan importantes para él.
El príncipe Harry, en el vídeo promocional de los juegos Invictus
En un texto que se ha hecho público ahora, el príncipe Harry ha asegurado que la mente es “como un músculo”, porque necesita ser “perfeccionada, entrenada, rehabilitada”, y ha hablado sobre su papel de “jefe de impacto” en la compañía.
“No podría pensar en un nuevo socio mejor para Invictus Games Foundation que la plataforma BetterUp. La mente es como un músculo: necesita ser afinada, entrenada, rehabilitada y preparada. Los hombres y mujeres con los que serví lo entienden, la comunidad Invictus lo sabe y ahora el mundo también está comenzando a verlo”, ha explicado el duque de Sussex.
Un mensaje del príncipe Harry que llega unos días antes de que los duques de Sussex pongan rumbo a los Países Bajos para estar presente en la inauguración de los Juegos Invictus el próximo sábado 16 de abril en La Haya. Este evento es muy especial para el nieto de Isabel II, ya que él mismo los creó en 2014 y cuenta con la participación de heridos y veteranos de guerra. Además, en esta ocasión va a ser todavía más importante, ya que va a suponer la primera aparición pública de Meghan Markle en Europa desde que decidieron dejar Reino Unido.
Un regreso a Europa que es todo un pulso a Isabel II, ya que los duques viajarán a los Países Bajos tan solo dos semanas después de que se convirtieran en los grandes ausentes del homenaje del duque de Edimburgo, al que decidieron no acudir aludiendo problemas de seguridad. Una decisión que seguro no ha sentado nada bien a la monarca.