La princesa Leonor, impecable con el uniforme de gala de la Armada, en un desfile pasado por agua

Octubre es un mes marcado en rojo para la familia real española y lo es, especialmente, para la princesa Leonor (18 años). Después de dos meses volcada en su formación militar en la Escuela Naval de Marín, la heredera al trono ha vuelto a acaparar todos los focos este 12 de octubre.

Ni la fuerte lluvia que caía en Madrid este sábado ha sido capaz enturbiar un acto en el que Leonor ha lucido con orgullo el uniforme de gala de guardamarina. Si hace un año nos sorprendía por primera vez con el uniforme del Ejército de Tierra, hoy ha optado por el impecable traje de gala de la Armada. Un conjunto de chaqueta entallada, camisa blanca y pantalón que ha completado con una gorra que le ha dado más de un quebradero de cabeza durante el desfile.

Parece que cada vez que Leonor preside un acto vestida de militar el peso que se posa sobre sus hombros es aún mayor, de ahí que sus nervios se hicieran palpables en más de un momento durante el desfile, donde ha visto pasar a sus compañeros de la Armada.

La princesa de Asturias ha participado activamente en el acto y no dudaba en acompañar a su padre en el tradicional homenaje a los caídos mientras depositaban la corona de laurel en recuerdo a los que han dado su vida por España. Leonor es militar y eso implica una serie de cambios en todos los actos castrenses que preside. Además, la hemos visto entonar la canción ‘La muerte no es el final’ desde el palco real, uno de los momentos más emotivos de este acto central con motivo de la Fiesta Nacional.

Una vez concluya el desfile, a eso de las 13.15 horas, los reyes y su hija se trasladarán hasta el Palacio Real donde dará comienzo una multitudinaria recepción para más de 1.500 personalidades procedentes de todas las esferas sociales de la vida pública nacional. Por segundo año consecutivo, la princesa Leonor les acompañará en el intenso besamanos que tendrá lugar en el Salón del Trono. Un gran cambio en sus obligaciones institucionales con el que deja patente que ya no es ninguna niña y su implicación con la Corona es total y absoluta.

En el aire está si la princesa Leonor optará por cambiarse de cara a la recepción como sí hace don Felipe o seguirá luciendo el uniforme como el resto de sus compañeros de Marín.

El motivo por el que la princesa Leonor no ha desfilado

Aunque lo cierto es que desde Casa Real nunca se planteó la idea de que la princesa Leonor desfilara junto a sus compañeros de la Escuela Naval de Marín, el motivo que esconde esta rotunda decisión no es otro que la seguridad.

Además de que Leonor no habría tenido tiempo para prepararse el desfile ya que ingresó en Marín el pasado mes de agosto, desde el equipo de seguridad de Casa Real no veían con buenos ojos. Tampoco podemos obviar que cuando se trata de actos de relevancia como este, ella no es una más. Su labor no es la de un mero soldado sino la de servir como heredera al trono. No obstante, la princesa y actual guardamarina seguirá con un interés muy especial el momento en el que sus actuales compañeros pasen por delante de la tribuna real.

El férreo protocolo que debe seguir Leonor el 12 de octubre

Aunque durante su reinado don Felipe y doña Letizia están intentando distanciarse del férreo protocolo de la Casa Real, hay citas ineludibles, como la de este sábado, que exigen una larga lista de normas a llevar a cabo.

Al margen de las fuertes medidas de seguridad que se esperan desde primera hora de la mañana, lo primero a tener en cuenta si estás invitado es saber cómo ir vestido. Mientras que don Felipe, como mando supremo de las Fuerzas Armadas, podrá elegir entre los diferentes uniformes de gala de los Ejércitos de Tierra, Mar y Aire. Doña Letizia lo hará de civil. Está estipulado que todas las mujeres invitadas al desfile deben usar vestido de cóctel al tratarse de un acto de día. Sin embargo, no siempre ha sido así. Nos tenemos que remontar al año 2010 para recordar como la entonces princesa de Asturias estrenó un traje de chaqueta, algo que fue muy criticado por el sector más clásico. Leonor, por su parte, sigue el ejemplo de su padre y podría llevar cualquiera de los uniformes que ya tiene en el armario.

Siguiendo con el protocolo que marca este 12 de octubre, ya en el Palacio Real será el Presidente del Gobierno quien de comienzo a la tradicional recepción en el Salón del Trono. Saludar a más de 1.500 personas requiere de un tiempo extenso que está marcado por varios recesos, tiempo en el que los reyes y su hija se retiran a otra sala colindante para descansar. Tras el saludo, los invitados se dirigen al comedor de gala para disfrutar del cóctel, momento en el que se realizan los tradicionales corrillos.