La princesa Leonor (17 años) ha ingresado en la Academia Militar de Zaragoza este jueves, 17 de agosto. Llegó acompañada de sus padres, el rey Felipe VI (55 años) y la reina Letizia (50 años), y su hermana, la infanta Sofía (16 años). Tras saludar a las autoridades de la academia, la familia se ha despedido con grandes abrazos y la princesa ha entrado en el recinto. Ahora, solo un día después, hemos podido ver sus primeras imágenes vestida de militar.
Antes de dejar a su primogénita iniciar esta nueva etapa, la familia real al completo acompañó a Leonor en su firma del Libro de Honor de la academia. La princesa se mostraba sonriente mientras escribía en el documento. Lo hacía ante la atenta y feliz mirada de sus padres y hermana. Esta estampa es familiar para el rey Felipe, ya que el mismo la vivió en septiembre de 1985. Él permaneció en la academia, conocida como 'la General', llevando a cabo sus estudios militares, hasta julio de 1988. Ahora, es el turno de la princesa Leonor.
Leonor luce, al igual que sus compañeros, un informe militar en el que se pueden leer sus apellidos: Borbón Ortiz. Para el peinado ha optado por un moño bajo, y de complementos luce un sencillo reloj negro. Ella es una de las 140 mujeres que forman parte de este primer año que arranca en la Academia General Militar, uno que en total cuenta con 612 alumnos.
La heredera al trono ya ha comenzado su formación, una que le permitirá ostentar el cargo de Capitán General de los Ejércitos. Para completarla, después de su paso por el Ejército de Tierra, continuará en la Escuela Naval Militar (en Pontevedra) y la Academia General del Aire (en Murcia).
Así fue el primer día de Leonor en la academia militar
En las inmediaciones de la academia confesó tener "muchas ganas" de empezar esta nueva etapa, aunque eso no impedía que estuviera "un poco nerviosa". A su llegada, la princesa Leonor se presentó ante varios miembros de la academia mientras portaba su maleta por el interior del recinto. Allí, en uno de los patios de las instalaciones, ha podido hablar por primera vez con otros recién llegados como ella. Es decir, la princesa ya tuvo este jueves su primera toma de contacto con los que serán sus compañeros durante su formación militar.
Para su llegada, la princesa de Asturias dejó de lado los coloridos vestidos que ha lucido durante sus vacaciones de verano y apostó por un sencillo outfit compuesto por pantalones blancos, camisa azul, zapatillas también blancas y una coleta baja.
La emotiva despedida de la princesa Leonor de su familia
El pasado jueves, la familia real llegaba al centro militar pasadas las 12.00 horas y rodeados de una gran expectación. Los reyes, Felipe VI y Letizia, así como sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, posaron ante los fotógrafos que allí se encontraban. Entraron a las instalaciones para que la heredera al trono firmara el Libro de Honor de la academia. Solo media hora más tarde, la familia real salía de nuevo de la academia para que la princesa recogiera sus maletas.
Fue entonces cuando ha tenido lugar un momento muy emotivo entre los cuatro. Los reyes, como cualquier familia, se han despedido de la princesa sin importar que estuvieran siendo grabados. Estos instantes tan conmovedores han sido registrados por las decenas de cámaras que había allí, confirmando así el fuerte vínculo que los reyes tienen con sus hijas.
Sofía fue la primera en dirigirse a su hermana. Lo hizo con dos cariñosos besos y un afectuoso abrazo. Solo hay dos años de diferencia entre ellas y eso ha facilitado que sean inseparables. Este es el tercer año consecutivo que Leonor y Sofía tienen que separarse. La princesa de Asturias no es la única que experimentará un cambio en su vida, en poco más de 10 días la infanta también dará comienzo al Bachillerato Internacional fuera de nuestro país.
El momento más conmovedor fue cuando la reina Letizia se despedía de ella. La monarca abrazaba a Leonor con fuerza y cerraba los ojos como signo de emoción. La reina acompañó a su primogénita unos metros sin querer soltarla, consciente de que Leonor ya es una mujer con obligaciones institucionales que quedan ya lejos de su control.