“Por suerte nunca será rey”. Este es el titular que ha elegido uno de los principales medios noruegos para abrir su edición matutina. El escándalo vuelve a rodear a la princesa Mette-Marit de Noruega y a su familia. Este pasado martes, su hijo, Marius Borg Høiby, era detenido por la policía después de agredir verbal y físicamente a una mujer cuya identidad no ha trascendido. El joven era reteñido durante 30 horas y puesto en libertad con cargos a la espera de juicio.
Marius Borg se refugiaba junto a su madre en su residencia habitual mientras el escándalo llegaba a los medios. “La casa real noruega no tiene hoy mucho de qué alegrarse”, afirman ‘Se oh Hor’. “Porque después de que se supo que el hijo mayor de la princesa heredera Mette-Marit, Marius Borg Høiby, fue arrestado , debe ser un alivio saber que no es un príncipe”. Los medios noruegos no se cortan a la hora de entrar a valorar el desagradable episodio y la vinculación de la princesa heredera.
La prensa noruega, muy dura con Marius Borg Høiby
“No es la primera vez que se avergüenza a sí mismo y a su familia real, aunque nunca tanto como ahora”, explica el citado medio. Y es que los escándalos han rodeado al hijo de la princesa Mette-Marit casi desde el principio, aunque, claro, ninguno tan grave como el actor. Borg cuenta ya con historial delictivo completo, ya que estuvo ingresado en prisión por un delito de tráfico de drogas. Ahora espera su nueva sentencia.
El hijo de la princesa era detenido en Oslo por unos hechos ocurridos la noche del 1 al 2 de agosto. Al parecer, Marius Borg habría agredido verbal y físicamente a una mujer de forma especialmente grave. La policía se personaba en la escena pero este lograba escapar y era detenido en otro lugar. La víctima acudía al centro hospitalario con una conmoción cerebral. El hijo de la princesa pasaba a disposición policial durante un total de 30 ahora.
Ahora, en libertad con cargos, el hijo de Mette-Marit se encuentra en el ojo del huracán. Sus escándalos siempre han dificultado la imagen de su madre y la relación con el príncipe Haakon de Noruega pero todo ha ido un paso más allá. El último y grave escándalo han hecho que los medios noruegas se planteen cómo va a responder la Casa Real y qué papel tiene el hijo de Mette-Marit en los asuntos de la Corona.
La princesa Mette-Marit, en el blanco de las críticas de la prensa noruega
“Como buena madre que es la princesa heredera, lo ha protegido en cada ocasión y ha pedido a la prensa que lo deje en paz”, apunta el citado medio. “Pero, por supuesto, es difícil si terminas esposado y en una celda de goma porque, según la policía, las manos están demasiado flojas”. La Casa Real, tal y como recogen varios medios, ha optado por no realizar comentarios al respecto.
Si bien, es fácil la justificación ya que el hijo de Mette-Marit no forma parte de la Familia Real ni está llamado en la línea de sucesión. Pero la relación que mantiene con su madre y con el que será el futuro rey hacen que sus acciones tengan consecuencias. No es la primera vez que la Casa Real debe salir al paso de sus caprichos y problemas. Con el 50 aniversario del príncipe Haakon, Marius Borg se excusión asegurando que se encontraba enfermo pero poco después se le vio acudiendo a una fiesta esa misma noche.
“El hijo de la princesa heredera fue arrestado poco después de la agresión, arrojado a una celda de aislamiento y, según los medios noruegos, no fue liberado hasta ayer lunes, después de 30 horas de detención”, apunta el periodista Heine Jørgensen. Un nuevo revés que se une a los problemas que ya acarrea la propia Mette-Marit, aquejada de una compleja salud que le dificulta los movimientos.