Pilar Eyre, experta en Casa Real, revela el primer shock de la reina Sofía antes de las fotos del rey Juan Carlos besándose con Bárbara Rey

Las fotos del rey Juan Carlos besándose con Bárbara Rey no han sido la escena más controvertida que ha tenido que contemplar la reina Sofía

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

reina Sofía

Ha sido un escándalo internacional. La revista holandesa ‘Privé’ sacaba a la luz las fotografías del rey Juan Carlos besándose con Bárbara Rey en su casa de Boadilla. La pareja, en la terraza, protagonizaba una escena de intimidad que terminaba en un beso apasionado. Un instante que confirmaba años, décadas, de rumores y especulaciones acerca de un romance que estuvo silencio a la prensa. Un escándalo que traspasaba fronteras y, además, encontraba al rey Juan Carlos de visita en España.

Mientras el emérito guardaba silencio, era Bárbara Rey quien se manifestaba. La vedette aseguraba estar en shock y muy triste y anunciaba medidas legales. Rey afirmaba que se trataba de unas fotografías íntimas tomadas en el interior de su casa. También dejaba claro que el autor de dichas imágenes no había sido su hijo Ángel Cristo Jr., tal y como afirmaba la revista holandesa. Pero no era esta la única protagonista.

¿Qué habrá pensado la reina Sofía al ver a su marido en portada besándose con otra mujer? Por aquel entonces, los reyes eméritos todavía proyectaban una imagen de unidad, amor y familia. Sonrisas y posados que trataban de ocultar los dramas que se vivían dentro de Zarzuela. Y es que estas imágenes no son las primeras que ha tenido que ver la reina Sofía. Tal y como contó Pilar Eyre, la emérita ya encontró a su marido en una situación comprometida. Un fecha que cambió todo y para siempre.

Cuando la reina Sofía pilló al rey Juan Carlos

La periodista Pilar Eyre retrataba en su monografía ‘La soledad de la reina’ la realidad que vivía la reina Sofía. Es el ‘bestseller’ más completo y documentado que se ha hecho sobre la figura de la hoy emérita. Fue allí donde apareció este episodio que cambió la relación de los reyes para siempre. Eyre se refería a él hace ya un año en uno de los episodios de su canal de youtube. La vez en la que la reina Sofía encontró al rey Juan Carlos en la cama con otra.

“Durante la época del franquismo, Juan Carlos se portó bastante bien, al menos lo hizo con tanta discreción que no se enteró doña Sofía”, explica Eyre. “Estaba muy vigilado, tenía micrófonos en la Zarzuela, despachaba con Franco todos los días y su tutor, el general Armada, elaboró un decálogo donde había 10 consejos para vigilar y encauzar la actuación de don Juan Carlos”. El futuro rey se mantenía en una postura correcta, sin estridencias. Duró poco.

Cuando murió Franco todo cambió, empezando por el aspecto físico. “Juan Carlos contrató al mero peluquero de Barcelona. Iba cada dos semanas a Zarzuela en su maletín. Empezó a cambiar de forma de vestir, iba más moderno, estaba bronceado. Dormía muy poco pero esto lo mantenía en forma y doña Sofía a penas lo veía”, explica la periodista. “Cuando se quejaba, él protestaba porque estaba intentando salir de la dictadura”.

Fue entonces cuando ocurrió la peor pesadilla para la reina Sofía. Esta ya tenía a sus hijos y seguía muy enamorada de su marido. Habían logrado ser reyes y el futuro era brillante. Nunca pudo imaginar que su matrimonio iba a sufrir un terremoto.

La fecha clave que acabó con el matrimonio de Juan Carlos y Sofía

“Un 10 de enero, era sábado, don Juan Carlos se había ido a los montes de Toledo a cazar. Doña Sofía se levantó y sin decírselo a nadie llamó a su chófer y le dijo que se iban a dar una sorpresa al rey”, apunta la periodista. La reina cogió a sus hijos y pusieron rumbo hacia la casa del amigo del rey Juan Carlos donde se encontraban cazando. “Cuando fueron llegando a la casona vieron que estaba todo cerrado. Los cazadores no estaban, estaba como si no hubiera nadie. El chófer le dijo que se fueran”.

En ese momento apareció el perro del rey. Era un mastín y los niños comprobaron que su padre sí estaba presente. La reina bajó, empezó a llamar a la puerta. Abrió el dueño de la casa. Le dijeron que el rey no estaba, que debían estar cazando en el monte. “La reina vio a uno de los escoltas del rey en la escalera que llevaba a las habitaciones. Sofía entró en una habitación y vio lo que nunca hubiese querido ver: a su marido con otra mujer”, afirma Pilar Eyre.

Fue el momento en el que su sueño se desmontó. La reina Sofía volvió a Zarzuela destrozada. Su marido estaba con otra. Fue entonces cuando decidió que iba a divorciarse. Muy enfadada aseguraba que no pensaba tolerar algo así. El jefe de la Casa del Rey le apuntó que tenía dos actos importantes al día siguiente donde no podía faltar. Y así fue. Sofía estuvo presente y puso su mejor sonrisa. Nadie debía saber lo que estaba pasando.

El consejo de la reina Federica, madre de Sofía

Tras cumplir con sus obligaciones, la reina Sofía se marchó a la India. Su madre, la reina Federica, se encontraba residiendo allí. Hizo escala en Londres donde comió con su hermano y puso rumbo a casa de su madre. “Había sido un viaje tan inesperado que contaron que los guardias que llevaba la reina tuvieron que dejar sus armas porque no habían tenido tiempo de tramitar sus armas”, explica Pilar Eyre. “La prensa recogió la noticia, asegurando que la reina y sus hijas habían ido a la India a visitar a su madre que se encontraba enferma”.

La reina Federica escuchó a su hija y fue clara y directa. Le explicó que podía separarse, sí, pero que pasaría a ser una reina en el exilio, en países donde nadie la quería y sin nadie a su lado. O podía seguir siendo la reina de España por mucho que su matrimonio se hubiese roto. Sofía, que había luchado por ello durante mucho tiempo, le hizo caso a su madre. Volvió a España y siguió con su vida. Eso sí, su relación feliz se quedó solo de cara a la galería.