La familia real (casi) al completo está de celebración. El 60 cumpleaños de la infanta Elena ha sido la excusa perfecta para reunir a toda la familia del rey Felipe VI (55 años). Poco a poco, hemos podido ver como se han ido acercando hasta el restaurante Pabú, en el distrito de Charmantín, en Madrid. La infanta Elena era de las primeras en llegar, junto con su madre, la reina Sofía, y su hermana, la infanta Cristina. También hemos presenciado como Irene, Juan y Pablo Urdangarin llegaban al local, así como Victoria Federica y Froilán. Tampoco ha faltado el rey emérito Juan Carlos I, así como Irene de Grecia, María Zurita o Alexia de Grecia han sido otras de las invitadas al evento.
Eso sí, si ha habido alguien cuya presencia ha sorprendido ha sido la de la reina Letizia (51 años) y Felipe VI. El matrimonio llegaba, muy sonrientes y cómplices, al restaurante e incluso han saludado a la prensa durante unos minutos. El hecho de que los reyes han accedido a ir ha dejado patidifusos a los presentes, ya que no estaba confirmada su asistencia y por todos es sabido la supuesta mala relación entre la reina y sus cuñadas. Sobre este aspecto, Pilar Eyre, periodista y escritora, ha querido lanzar un primer análisis y ha desvelado el verdadero motivo por el que Letizia ha acudido al cumpleaños de su cuñada.
"En estos momentos la reina Letizia está haciendo penitencia. Está comiendo con su familia política con quien tan mala relación tiene. Esta familia política que la detesta y que le ha hecho la vida imposible estos últimos años", ha comenzado, directa y tajante, Pilar. Para la bloguera de Lecturas, la presencia de la monarca en esta festividad no ha sido algo espontáneo, sino que tendría una estrategia muy bien elaborada detrás.
"Yo creo que ha tenido que agachar la cabeza. Lo que no ha conseguido nadie, lo ha conseguido [Jaime] del Burgo. Con esos tweets ha conseguido que Letizia se convierta en una persona sumisa, que pida disculpas de esta manera, que quiera estar al lado de su familia y que la proteja la familia real, algo que hasta ahora no había necesitado porque estaba en una posición de fuerza y ahora no lo está", ha reflexionado Eyre. Así, para la escritora, la actitud de Letizia estaría potenciada por su necesidad de protegerse a ella y también a sus hijas.
La reina Letizia da un paso al frente para proteger a su hija, Leonor
Este paso al frente de la reina Letizia, aunque haya sido para agachar cabeza, ha sido interpretado por Pilar como una prueba de que el matrimonio de los reyes no se romperá. "No creo que vaya a haber sorpresas en este matrimonio. Hay algunas personas que decíamos que el matrimonio iba mal y que seguramente habría una separación. Ahora yo creo que no. Creo que Letizia se ha sacrificado por la institución, es decir, por su hija y ha preferido mostrar esta imagen de afabilidad", ha señalado Eyre. Para la monarca habría sido esencial dejar claro que la familia real son todos y no solo Felipe y sus hijas.
En cuanto a la ausencia de Leonor y Sofía en el cumpleaños, Pilar cree que ha sido también una forma de protegerlas. "Hoy Leonor está en la academia y tenia excusa. Que, bueno, la academia, Zaragoza, está a una hora y media de Madrid en AVE. Podría haber ido perfectamente. Y también es cierto que Sofía está de vacaciones y está en Madrid, así que podría haber ido", ha apuntado Eyre.
En definitiva, la aparición de hoy para el cumpleaños de la infanta Elena ha sido una cuestión de necesidad, según Eyre, y no tanto de voluntad. "Hacer penitencia, agachar la cabeza y someterse como han hecho todas las mujeres en la familia real. Aguantarse", ha lanzado la escritora. Un movimiento que no debe haber sido fácil para la reina después de tantos años de comentarios y polémicas sobre su relación. "Le debe haber costado mucho después de todas las cosas que han dicho por detrás, las infiltraciones que ha habido, las informaciones negativas que han hecho correr", ha compartido Pilar. Un profundo análisis detrás de estas sorprendentes e inesperadas imágenes que han dado la vuelta al panorama real.