Pablo de Grecia, a lo princesa de Éboli: por qué lleva un parche en el ojo

Hace casi una semana que Marie-Chantal de Grecia (55) utilizaba sus redes sociales para publicar una fotografía que dejaba a todos boquiabiertos. En ella aparece Pablo de Grecia (56) con un parche en el ojo izquierdo durante la alfombra roja de la celebración de los Fashion Awards 2023 este pasado lunes en la ciudad de Londres. Sin dar más detalles sobre qué es lo que le había pasado, ella escribió en su publicación un cariñoso comentario con el que dejaba claro que no era nada grave: "Esperemos que sea un look temporal. Pero me parece que está bastante mono". Días después, este jueves 7 de diciembre, el propio jefe de la casa real helena el que se ha querido aclarar esta situación y aprovechar además para agradecer a todos los mensajes de cariño y ánimo que ha recibido.

Lo cierto es que el príncipe Pablo no es muy dado a compartir su día a día en sus redes sociales. Las escasas publicaciones en su perfil de Instagram suelen ser sobre las celebraciones y ocasiones importantes como sus aniversarios de boda con Marie-Chantal o la graduación de su hijo Achileas. Sin embargo, su mujer, que hace un mes cometió un error de protocolo muy llamativo, sí que es menos celosa de su intimidad y comparte más veces algunas fotografías que dejan ver un poco más cómo es su día a día y en su lado menos conocido. 

Con un pequeño texto, el sobrino de la reina doña Sofía e hijo del difunto rey Constantino de Grecia ha explicado a todos lo que se han interesado que tuvo que ingresar en el hospital para someterse a una operación en el ojo, motivo por el que ha tenido que ponerse dicho parche al más puro estilo princesa de Éboli: "Muchas gracias por su amable interés y deseos", empieza el escueto mensaje en inglés y en griego que ha compartido a través de sus redes oficiales. "Hace una semana me sometí a una cirugía de retina en Londres. La cirugía fue exitosa, pero no se me permite viajar por un tiempo", aclara Pablo. 

Pablo de Grecia  presume de su parche al estilo princesa de Éboli. 

Marie Chantal y Pablo de Grecia, ejemplo de ostentación 

Marie Chantal y Pablo de Grecia se han convertido en sinónimo de glamour y ostentación desde que residen en el Upper East Side de Nueva York (el barrio más exclusivo y donde reside la población con el poder adquisitivo más alto de la ciudad que no duerme), donde disfrutan de una vida tranquila que solo interrumpen para acudir a eventos sociales tanto en Manhattan como fuera del país. Mientras las casas reales europeas dan pasos al frente para abandonar el despilfarro y otras conductas rancias que amplía la brecha social y económica con el resto de la sociedad, la pareja vive de una forma más que despreocupada. Unos 'reyes' sin trono y sin corona que, tras la muerte de Constantino de Grecia, nunca ejercerán de jefes de Estado ni tendrán responsabilidad pública y, por lo tanto, no están ligados a la ejemplaridad de sus homónimos. 

De hecho, esta libertad es la que les permite acudir a citas como la del pasado lunes, cuando Marie-Chantal Miller fue junto a Pablo a celebrar el premio a la trayectoria de Valentino. Un evento en el que el primo de Felipe VI lució un esmoquin negro junto a ese parche que tanto ha llamado la atención. Además de Londres, el matrimonio se pasea por el glamour de París, el lujo en la nieve en Saint Moritz o desde el velero con el que surcan el Mediterráneo cuando regresan a 'casa', la pareja y su familia de cinco hijos representan la élite económica con pedigrí cuyo tren de vida responde al imaginario colectivo de lo que ha venido siendo la vida de la realeza. Al alcance de muy pocos, la gran incógnita es cómo lo costean. 

Pablo de Grecia sin el parche en el ojo izquierdo. 

Lo cierto es que la millonaria empresaria pertenece a la familia Miller, una de las sagas estadounidenses más importantes e influeyentes. Su progeniror es el empresario millonario Robert Warren Miller, cuyos antepasados están ligados al famoso 'Mayflower' y, más representativo, con raíces reales emparentadas con reyes de la Edad Media. Asimismo, se calcula que su impresionante fortuna está valorada en más de tres billones de dólares.