Por fin todo empieza a tomar rumbo en la vida de Beatriz de York. En los últimos meses la hija del príncipe Andrés y Sarah Ferguson lo ha pasado mal. El anuncio de su boda con Edoardo Mapelli coincidió con otros acontecimientos como el escándalo de su padre en el caso Epstein o el ‘Megxit’ Esto provocó que su enlace pasara a un segundo plano y que los detalles que rodean a la celebración de la boda se hayan visto condicionados por estas polémicas. Ahora, por fin, Beatriz de York ha visto cómo todo comienza a coger forma y empieza a disfrutar de los preparativos.
Una de las grandes incógnitas de su boda era el día en el que se iba a celebrar. Desde Buckingham Palace estaban buscando la fecha más adecuada para todos y entre tantos conflictos la han retrasado en numerosas ocasiones y no se han atrevido a anunciarla hasta ahora. El viernes 29 de mayo es el día elegido para que la nieta de Isabel II contraiga matrimonio con el multimillonario italiano. La ceremonia se celebrará en la capilla del Palacio de St James y la recepción posterior tendrá lugar en Buckingham Palace. Desde este momento la joven está volcada en prepararlo todo para el gran día.
Pero tiene que repartir el tiempo de los preparativos de su boda con su trabajo. Porque en su vida laboral también hay novedades. La hermana de Eugenia de York tiene una fundación. La creó hace unos años para llevar a cabo proyectos benéficos relacionados con la educación de los niños. Ahora que Harry y Meghan han abandonado la familia real británica, a Isabel II se le ha ocurrido que el proyecto solidario de su nieta Beatriz cobre protagonismo. De ahí que tenga en marcha nuevos proyectos en los que se va a involucrar personalmente.