El último gran homenaje a la reina Sofía está en el aire. Ha sido la prensa griega, siempre muy afín y cercana a la figura de la reina emérita, la que ha desvelado el complicado momento que atraviesa. “Los intentos de la ex reina Sofía de promocionar su biografía, "La última reina", para una adaptación televisiva o cinematográfica han caído en saco roto”, afirman sin tapujos. “Nadie quiere a Sofía”, reza uno de los artículos que más dolor han provocado.
La reina emérita vivía ilusionada el intento de llevar su vida a la gran pantalla. Como ya ocurriese con otras grandes reinas, hubiesen sido el colofón a un vida dedicada a la Corona y a servir al país. Hija, esposa y madre de reyes, Sofía considera que su labor ha sido impecable y deseaba ver como su historia se convertía también en ficción. Pasar a ser inmortal no solo el los libros, sino también en el mundo audiovisual. No obstante, este deseo deberá esperar.
“El rechazo de la adaptación cinematográfica del libro sugiere una dificultad para incorporar sus dimensiones personales en una narrativa dramática”, explican en la prensa griega. A pesar de haber vivido algunos de los episodios más humillantes de mano de su marido, el rey Juan Carlos, las productoras no acaban de ver que su ficción pueda ser interesante para los espectadores. Llevar la vida de la reina a la pantalla es un paso importante y complicado.
Un rotundo ‘no’ a la reina Sofía
“Su devoción, aunque admirable para el pueblo español, probablemente parezca menos dramática que las historias más tumultuosas de otras familias reales”, reza el portal ‘Ta Nea’. “El único proyecto audiovisual que ha visto hasta ahora el país ibérico fue una miniserie de cuatro episodios que se emitió el año pasado por HBO Max llamada "Sofía y la vida real". Se rumorea que ella no conmovió a la audiencia televisiva, lo que hizo que su biografía tampoco fuera comercial para los canales”.
La historia de la reina Sofía no deja de ser apasionante. Hija de reyes en el exilio, vivió en primera persona el cambio en Grecia. Su matrimonio con el rey Juan Carlos la convirtió luego en testigo de excepción de la transición en España. Y los escándalos de su vida personal terminaban de dibujar un personaje que llevado a la ficción podría interesar y mucho. Pero no ha sido así.
“El apoyo limitado de su familia y los problemas de salud de su hermana no convencieron a los propietarios del canal de convertir el libro en una película o una serie”, explican en el citado medio. “El esfuerzo por promocionar la biografía se basó también en reportajes que hacían referencia a la soledad que vivía la reina Sofía, a pesar de la presencia de algunos amigos íntimos y de su hermana, Irene de Grecia”
Ni siquiera la exposición mediática de la reina a raíz de los audios y fotografías del rey emérito con Bárbara Rey hacían que la biografía de la reina Sofía cobrase mayor interés. Tampoco su papel fuera de España, donde su estela no ha sido tan conocida como la de otras reinas de otras monarquías europeas.
Unos años muy complicados
La reina Sofía vive en cierta soledad el momento personal que sobrelleva. La muerte de su hermano Constantino y el declive de su hermana Irene han hecho que la reina esté más sola que nunca. Su hermana ha sido siempre su confidente y mano derecha, la persona que dejó todo para acompañarla en su labor como regente. Ahora le toca a ella cuidar a la pequeña de la familia.
Solo su hermana Irene y su prima Tatiana han estado al lado de la reina Sofía en todo momento. Han sido sus personas de confianza, las únicas que han conocido sus secretos y su verdadera situación. Como ha asegurado en numerosas ocasiones, un rey no tiene amigos. La Corona va por encima de todo, incluso de la vida personal. Algo que explica también la ficción pública que ha mantenido el matrimonio a pesar de llevar décadas separados.
El paso del tiempo ha dejado a la reina Sofía con un poso de tristeza. Siempre a la espera de cumplir compromisos de la Casa Real, la madre del rey sigue siendo el único miembro, además de los propios reyes y ahora la princesa Leonor, que mantiene una agenda institucional. Es el premio a los años de servicio a la Corona. Algo que ha llenado su vida profesional pero ¿y la personal?
Víctima de un escarnio público
Aunque fuese un secreto a voces, las infidelidades del rey Juan Carlos han cobrado importancia en los últimos meses. Desde que saliese a la luz la relación del emérito con Corinna Larssen, la reputación del rey Juan Carlos ha estado completamente en entredicho. Lo que ya nadie imaginaba era que el mundo entero terminaría viéndole besándose con una mujer que no es su esposa. Ha ocurrido en 2024 y la protagonista ha sido Bárbara Rey.
Nadie estaba exento de conocer la relación que mantuvieron el que era jefe de Estado con la presentadora y vedette. Ella misma lo había contado en un documental y en una serie de ficción. No obstante, ha sido ahora cuando la prensa ha publicado sus conversaciones privadas y las fotografías captadas en su casa. Era un medio holandés quien se hacía eco de las imágenes del entonces rey con la vedette en el hogar de estado. Una situación cotidiana que terminaba con un beso.
Los ojos se pusieron rápidamente en la reina Sofía. Tanto las fotografías como las conversaciones publicadas donde el hoy emérito hablaba de su esposa y de sus hijos explicaban mucho de lo ocurrido en la Corona. Sofía, que no mantiene relación con su marido desde hace décadas, seguía con su vida y sus compromisos institucionales. Nada ya puede perturbar algo que tiene asumido desde que se casó. Las deslealtades del rey Juan Carlos han sido constantes e incontables.