Meghan Markle desafía a Carlos III: la gran ausencia en el día de la Coronación

Este 6 de mayo es una fecha muy significativa para la Familia Real británica, es el día en el que el rey Carlos III (74 años) es coronado y además es el cumpleaños de Archie, hijo de Meghan Markle (41 años) y el príncipe Harry (38 años). El primogénito de los duques de Sussex cumple 4 años y su madre ha preferido pasar ese día tan especial con él, en lugar de acudir a la abadía de Westminster. 

A pesar de que tanto Meghan como Harry estaban invitados a la coronación,la duquesa de Sussex ha renunciado a formar parte de este día porque prefiere quedarse en California al cuidado de sus dos hijos. La royal aprovechará para celebrar en la intimidad al cuarto cumpleaños de su primogénito a pesar de la ausencia de Harry. éste solo estará en Londres el tiempo necesario para acudir a la coronación y poco más, luego volverá a poner rumbo a Estados Unidos para estar con su familia. 

Un viaje exprés y una ausencia muy destacada

El príncipe Harry se limitará a hacer un viaje fugaz a su país natal para asistir al gran día de su padre, pero no estará en los eventos posteriores que se celebrarán en homenaje a Carlos III tras ser coronado como rey de Inglaterra.

El hijo menor de Diana volverá tan pronto como le sea posible a Montecito a disfrutar de su familia y ver a Archie después de que ya haya cumplido 4 años. No sería extraño que Meghan y Harry hicieran alguna celebración más por el cumpleaños de su hijo mayor, una vez que el duque de Sussex llegue a casa. 

Mientras Harry se encuentra en la abadía de Westminster, Meghan aprovechará la ocasión para celebrar con sus dos hijos y algunos familiares y amigos íntimos, el aniversario de Archie. Seguramente será algo muy privado y hermético porque es el máximo deseo de los royals en la actualidad, la prensa alejada de casa. 

Meghan Markle, duquesa de Sussex

La mejor opción para Meghan Markle era no asistir a la coronación

Han pasado muchos meses desde que la relación entre los royals exiliados y la Familia Windsor se empezara a tensar cada vez más. La aparición de los duques de Sussex en el documental de Netflix contando su relación  y los motivos de su marcha de la Familia Real británica ha causado estragos en su relación con los diferentes miembros de la Corona. 

Aunque quizás lo que ha terminado de tensar la cuerda entre ambas familias haya sido la publicación de Entre las sombras, las memorias del príncipe Harry. A pesar de que la relación entre los duques de Sussex y la Familia Real no atraviesa su mejor momento, Carlos III quiso que ambos estuvieran el día de su coronación a su lado. 

Una vez mandada la invitación por parte del palacio de Buckingham, la pelota se encontraba en el campo de Harry y Meghan. Supuestamente habrían estado negociando una serie de condiciones: que sus hijos tuvieran el mismo papel que los hijos de los príncipes de Gales y que pudieran aparecer en el tradicional saludo que se realiza en el balcón del palacio de Buckingham , con el resto de miembros de la Familia Real británica. 

Este último deseo, era algo prácticamente imposible porque salir a ese balcón está reservado exclusivamente para los miembros activos de la Casa Real, categoría que perdieron Harry y Meghan al renunciar a sus funciones en 2020. 

Por todos estos motivos y la escasa relación que tiene con Kate Middleton, Meghan Markle ha apostado por quedarse en su zona de confort y dejar que sea el príncipe Harry  el que acuda en solitario pero en representación de la pareja, a la coronación. 

Aunque recientemente, en un comunicado emitido por sus representantes, la duquesa de Sussex ha querido negar la supuesta mala relación que tendría ella con la familia de su esposo. "La duquesa de Sussex vive su vida en presente, sin pensar en cuestiones de hace dos años relacionadas con las conversaciones de hace cuatro años. Cualquier especulación es falsa y francamente ridícula. Alentamos a los medios de comunicación sensacionalistas a detener el circo agotador que ellos solos están creando", informaba el comunicado entregado a la revista HELLO!.