La agenda de Máxima de Holanda, pese a la situación de crisis sanitaria mundial, continúa tan ajetreada o más que siempre. La reina de los Países Bajos es una de las royals que más se está implicando en el apoyo y la lucha contra el covid-19, y prácticamente cada semana protagoniza una salida de Palacio para atender compromisos de forma presencial.
Este martes la esposa del rey Guillermo de Holanda acudía a una fábrica de material sanitario, una visita en la que ha querido conocer de primera mano todos los detalles del procedimiento que conlleva crear las mascarillas médicas de tipo FFP2.
Ha sido en la fábrica AFPRO donde Máxima se reunía con los especialistas de este campo. Las mascarillas que allí se producen están realizadas con materiales de la más alta calidad, dando como resultado las mejores piezas para la filtración de aire, tan demandadas a nivel mundial desde hace unos meses.
Un detalle que no ha pasado por alto en esta salida de Palacio de la reina ha sido el que haya prescindido de usar mascarilla, una elección que resulta más que incoherente teniendo en cuenta el marco en el que se realiza dicha visita, y el motivo de la misma. Sin guantes ni ninguna otra protección visible, Máxima de Holanda ha campado a sus anchas por todo el recinto.
Para esta reunión, la soberana sí que escogía un look de lo más clásico, que ha sabido realzar con los complementos adecuados. El conjunto bicolor, en blanco y negro, constaba de pantalones culotte negros y un maravilloso top blanco de manga larga con lazada en la cintura y botones grandes, firmado por una de sus marcas favoritas, Natan.
Como accesorios, la argentina sacaba de su armario unos maravillosos tacones negros efecto charol con tira trasera de PVC -modelo Nicole de Gianvito Rossi-, un pequeño clutch negro, unos llamativos pendientes en tono perla compuestos por varias piezas y su inseparable reloj de Cartier .