Su relación está inmersa en la polémica desde el primer momento y, después de haber protagonizado unas cuantas instantáneas juntos este verano, Marta Luisa de Noruega aparece sin Durek Verret en una celebración de cumpleaños muy especial.
Hasta Svalbard, en el Glaciar Ártico, ha viajado la hermana del heredero Haakon acompañada de un grupo de amigos para organizar una reunión con la nieve, las montañas y el frío como protagonistas. Pero en esta ocasión entre ellos no estaba su pareja, el chamán Durek Verret.
Marta Luisa, que ha ido relatando su viaje paso por paso a través de su cuenta de Instagram, ha escogido este espectacular enclave para "escuchar el silencio ensordecedor de la naturaleza ártica, su vulnerabilidad debido al calentamiento global y realizar un viaje interior en el majestuoso paisaje con montañas que tienen mil millones de años". Como alojamiento, el grupo optó por el hotel Funken Lodge, que goza de unas vistas de ensueño, además de unas instalaciones únicas. El complejo, que se levantó en 1947 tras la segunda Guerra Mundial, es un espacio idílico enclavado en un entorno repleto de historia.
Según ha desvelado la nuera de los reyes Harald y Sonia de Noruega, los guías que acompañaron al grupo durante las excursiones han ido cargados con armas ya que en la zona que visitaron habitan abundantes osos polares, algunos de ellos se dejaron ver sin ningún percance. Durante la visita, el glaciar Longyear, de más de 15.000 años, fue uno de los puntos a destacar, donde Marta Luisa y sus amigos pudieron coger fósiles y descubrir plantas atrapadas entre las piedras desde hace millones de años. Sin duda, una experiencia perfecta para "cambiar la perspectiva y ver la vida a través de una lente distinta", aseguraba.
En la zona de Svalbard no hay sol durante los meses de octubre y febrero, por ello la hermana de Haakon y sus amigos disfrutaron de lo lindo durante este viaje, ya que pudieron disfrutar de la luz natural y protagonizar instantáneas impresionantes. Un lugar mágico que la princesa ha vivido sin su pareja en lo que quizá haya sido un momento para reconectar con ella misma y volver con fuerzas para afrontar lo que el otoño les depare.