La pandemia provocada por el coronavirus ha cambiado muchos aspectos en la vida de los ciudadanos, y la Casa Real no iba a ser menos. Adaptando su rutina y reinventando su manera de atender compromisos y reuniones, tanto el rey Felipe como Letizia se han mostrado más implicados que nunca.
Sin embargo, ha sido la reina la que ha cobrado más protagonismo ante esta complicada situación, gestionando una intensa agenda de audiencias virtuales, tanto con su esposo como en solitario.
Cierto es que otras reinas y princesas de Europa, como Matilde de Bélgica, Máxima de Holanda o Victoria de Suecia, están realizando un gran papel en la lucha contra el covid-19, saliendo en numerosas ocasiones de sus residencias para atender personalmente sus compromisos; pero el trabajo de la reina Letizia está siendo de lo más constante, tanto dentro como fuera de Zarzuela, sin descansar prácticamente ni un solo día.
En comparación con otras consortes, como Silvia de Suecia, Sonia de Noruega o María Teresa de Luxemburgo -quienes han reducido su labor institucional a la mínima expresión-, no cabe duda de que el trabajo constante de la esposa del rey Felipe destaca sobre el de todas ellas.
Además, la reina consorte está participando en la medida de lo posible en los actos en los que interviene don Felipe, a excepción de las audiencias estrictamente políticas que este mantiene en su despacho con ministros y otros dirigentes, puesto que, según la Carta Magna, ella no puede desarrollar funciones constitucionales, más allá de lo previsto para el caso de regencia.
De esta manera, el matrimonio sigue los pasos de Guillermo y Máxima de Holanda, quienes forman el tándem perfecto ante los ciudadanos de los Países Bajos, quienes les han calificado con un 7,7 al soberano, y un 8 a la argentina. La continua presencia de la reina de los holandeses se ha convertido en una buenísima estrategia que, tal y como parece, están imitando desde la Casa Real española.
A pesar de su tardía incorporación, -cabe recordar que la consorte comenzó una cuarentena por precaución tras haber coincidido en un acto con la ministra Irene Montero, contagiada por coronavirus-, desde hace semanas Letizia está volcada en su labor en asuntos tan relevantes como la lucha contra las enfermedades raras o contra el cáncer, organizaciones dedicadas al combate de lacras como la violencia machista o la trata de mujeres, colectivos en riesgo de exclusión como las familias gitanas sin recursos o los niños con problemas de malnutrición, todos ellos ahora dentro del marco del covid-19. Además, la cultura siempre ha sido otro ámbito prioritario en su agenda y también lo está siendo estos días, en contacto con instituciones y personalidades de las artes.