La relación suegra-nuera de Beatriz y Máxima de Holanda: de una prohibición a una cena que lo cambió todo

Beatriz y Máxima de Holanda mantienen una relación suegra nuera que en un principio estuvo marcada por la tensión pero que pronto supieron mejorar

Helena Arriaza
Helena Arriaza

Redactora digital de Lecturas

Beatriz y Máxima de Holanda
Gtres

En la familia real holandesa están de celebración. Beatriz de Holanda cumple 86 años en un momento marcado por la tranquilidad. Se acaban de cumplir 14 años desde que hizo el anuncio de su abdicación, con el que cedió el trono a su hijo Guillermo (56 años). Algo que conlleva que él lleve ya todo este tiempo ejerciendo como monarca y que Máxima de Holanda (52 años) haga lo propio como reina consorte. Un papel con el que la reina Beatriz estaría encantada y que no ha hecho más que incrementar la relación con su nuera pese a que en sus comienzos las cosas no fueron del todo fáciles.

¿Por qué Beatriz de Holanda no aceptaba a Máxima?

El hecho de que el por entonces príncipe Guillermo compartiera con su familia que mantenía una relación con Máxima no fue del todo bien acogido. Natural de Argentina, hija del que fue ministro de Agricultura durante la dictadura de Videla, sin sangre azul… Estas fueron algunas de las cuestiones que hicieron que en un primer momento a la reina Beatriz le costara asumir que su hijo quería casarse con Máxima Zorreguieta. Pero en cuanto la conoció un poco más, aceptó de buena gana que su hijo Guillermo la hubiera elegido a ella para compartir el resto de su vida.

La cena que cambió la relación de Beatriz y Máxima de Holanda

La buena sintonía comenzó cuando el príncipe Claus, marido de la reina Beatriz, organizó una cena secreta para disfrutar de una velada familiar e íntima en la que poder conocer a Máxima de forma relajada y con la menor presión posible. Una velada en la que la por entonces novia del príncipe Guillermo se mostró natural, agradable y muy pendiente de sus suegros. Esto encandiló a la por entonces monarca e hizo que su percepción cambiara y viera con buenos ojos el matrimonio de la pareja.

La prohibición sobre Máxima de Holanda el día de su boda

Eso sí, hubo una condición que a Máxima de Holanda no le quedó más remedio que aceptar si quería celebrar su boda con Guillermo. Se trata de la prohibición de que su padre Jorge Zorreguieta asistiera al enlace. El día de la boda, la novia no pudo evitar las lágrimas, y mucho se habló entonces de que la razón fue que no pudo contar con su familia para el gran día. El motivo, esa relación de Jorge Zorreguieta con la dictadura argentina. Algo que también afectó a la madre de Máxima, que tampoco estuvo presente en el casamiento de su hija.

Beatriz y Máxima de Holanda, una relación marcada por la buena sintonía

Pero más allá de esto, en todos estos años que dura ya la relación de Guillermo y Máxima de Holanda, suegra y nuera no han acaparado ningún titular polémico. Todo lo contrario. En las ocasiones en las que han hecho apariciones conjuntas, se han mostrado de lo más cómplices y han presumido de la unión que tienen y con la que las dos estarían encantadas. Además, Máxima habría encontrado en su suegra el mejor espejo en el que mirarse para su papel de reina.

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Las palabras que Beatriz y Máxima de Holanda se han dedicado públicamente

Cuando a Guillermo le tocó asumir el papel de rey de Holanda, Máxima hizo unas declaraciones al medio holandés RTL News con las que destacó lo que suponía para ella seguir los pasos de su suegra Beatriz. “Es un enorme honor suceder a mi suegra, tenemos un gran trabajo por delante, pero va a ser una tarea muy placentera”, aseguró dejando ver cómo para ella la reina era el mejor espejo en el que mirarse. Del lado contrario, Beatriz comentó que en ese momento tanto su hijo como su nuera estaban “plenamente preparados para la tarea”. Unas palabras de aliento y confianza que no han dejado de sucederse en todos estos años.