La infanta Sofía (16 años) ha sido protagonista el fin de semana por su presencia en la final del Mundial de fútbol femenino. No es habitual que la hija pequeña de los reyes haga aparición junto a la reina Letizia (50 años), sin su padre el rey Felipe (55 años) y sin su hermana la princesa Leonor (17 años). Pero su gusto por el fútbol y el hecho de que fuera una competición con la que dar visibilidad al deporte femenino, llevaron a que desde la familia real tomaran la decisión de que la joven viajara con su madre hasta Sídney. Un viaje durante el que ha demostrado que ha sabido sacar partido a la ausencia de su hermana la princesa Leonor.
Inevitablemente, la princesa de Asturias suele llevarse más protagonismo que su hermana la infanta Sofía. La condición de heredera que tiene Leonor, hace que tenga más peso en la corona y que su hermana pequeña siempre esté a la sombra. Algo que no quita para que las miradas también vayan a ella cuando aparecen juntas, pero siempre teniendo claro quién es la que un día reinará. Por eso, que haya hecho aparición sin su hermana mayor, ha llevado a que la infanta Sofía se haya convertido en el foco de todas las miradas. Una oportunidad que ha aprovechado para reclamar su sitio y para afianzarse. Repasamos las claves de cómo lo ha hecho.
La infanta Sofía aprovecha su pasión por el fútbol
Que la infanta Sofía acudiera a un evento relacionado con el fútbol no fue casualidad. La joven es una apasionada de este deporte que incluso practica. De ahí que aprovechara una competición femenina para apoyar a las mujeres que practican este deporte y para darle visibilidad. Además, con esta afición, la infanta Sofía se diferencia de su hermana Leonor y de otras royals europeas, y su presencia en Sídney ha sido la mejor forma de dejarlo ver.
Las primeras palabras en televisión de la infanta Sofía
Nada más llegar a Sídney, la infanta Sofía habló para las cámaras de televisión. Por primera vez en su vida, la hija pequeña de los reyes Felipe y Letizia respondió a las preguntas que le hicieron en La 1 y habló ante los micrófonos. Nerviosa y breve, dio este paso al frente con el que ganó peso dentro de la institución. Lo hizo bajo la atenta mirada de su madre. “La verdad es que estoy deseando que empiece el partido e ir al vestuario después pase lo que pase”, fue el discurso que dio en la cadena pública.
La infanta Sofía, con el respaldo de su madre la reina Letizia
Otra de las claves de cómo la infanta Sofía ha conseguido ganar terreno, ha sido la complicidad que mostró con su madre la reina Letizia y cómo contó con su respaldo en un día en el que sabía que todas las miradas se posarían en ella. Que no estuvieran ni el rey Felipe ni la princesa Leonor, el actual monarca y la futura reina, se convirtió en la mejor oportunidad para que la reina Letizia y la infanta Sofía dieran muestra de su buena sintonía y de que acapararan todos los titulares.
La espontaneidad de la infanta Sofía
Entre los aspectos más destacados de la aparición de la infanta Sofía en Sídney, está la espontaneidad que mostró. La victoria de España, la euforia de los jugadores y que su madre la reina Letizia se mostrara desinhibida tras el triunfo, hicieron que la infanta Sofía diera rienda suelta a su lado más espontáneo, saltándose el protocolo con diferentes gestos. Una forma de mostrar su parte más natural y de dejar ver su lado más cercano y juvenil.
El look de la infanta Sofía
Como ocurre en cada una de sus apariciones, la infanta Sofía hizo gala de su estilo. La forma de vestir dice mucho de una misma y también es una manera de darse a conocer. Esta vez, lo hizo con un look de básicos con el que se adelantó a varias de las tendencias del otoño. Con abrigo blanco, jersey de rayas marineras y pantalones holgados, firmó un conjunto muy sencillo con el que fue cómoda, juvenil y marcando tendencia. Además, de alguna forma se inspiró en su madre porque sus prendas bien podrían estar en el vestidor de Letizia. De hecho, alguna recordó a prendas que alguna vez ha llevado la reina.