Aunque los duques de Cambridge llevan años presentes en las redes sociales, ninguno de ellos había compartido nada, ya que no eran los encargados de subir las cosas, sino su equipo de comunicación. Una tradición que se cumplía en todas las cuentas de palacio, hasta la llegada de Meghan Markle.
Cuando los duques de Sussex se abrieron sus propios perfiles de Twitter e Instagram rompieron la tradición de Buckingham. En concreto, Meghan y Harry decidieron escribir ellos mismos sus mensajes, lo que ha hecho que su trabajo humanitario sea percibido como más real y cercano.
Una estrategia a la que ahora también ha decidido apuntarse Kate Middleton. La duquesa de Cambridge se ha lanzado a la piscina por una buena causa: promocionar la ONG SOS Village. “La comunidad de SOS Village está construida alrededor del concepto de familia -la mejor que puedas imaginar- donde todo el mundo se une para amar y proteger a los niños que están bajo su cuidado”, ha escrito Kate junto a unas fotos en las que se ve al príncipe William jugando con unos niños.
“Estos niños vulnerables, muchos de los cuales han pasado por circunstancias traumáticas, se nutren de este ambiente y son capaces de formar las relaciones personales de calidad que necesitan para prosperar”, ha concluido la duquesa, quien para no dejar dudas de que lo había escrito ella ha puesto su nombre al final.