Tras acaparar todas las miradas durante la celebración del día de la Commonwealth, Kate Middleton ha vuelto a deslumbrar este jueves 17 de marzo en otro de los eventos anuales marcadas a rojo en el calendario de la casa real británica: la ceremonia militar con motivo el Día de San Patricio, que se ha celebrado por primera vez desde que comenzó la pandemia.
Junto con el príncipe Guillermo, la duquesa de Cambridge se ha desplazado hasta Aldershot, en Hampshire, para presidir el homenaje a la guardia irlandesa y, un año más, ha sido la encargada de entregar a los oficiales y guardias las ramitas de trébol.
Tal y como manda la tradición, Kate Middleton ha apostado por un estilismo completamente verde, en honor a esta celebración irlandesa. En concreto, la duquesa de Cambridge ha optado por un abrigo de la firma Laura Green realizado en lana jaspeada verde esmerarla, cuello estructurado, charreteras sujetadas con botones de cuero azul y un cinturón con hebilla a juego. Una prenda que cuesta 3.200 libras (unos 3.800 euros).
Un elegantísimo abrigo sobre el que Kate Middleton ha lucido un broche dorado en forma de trébol, que en su momento formó parte del joyero de la Reino madre, además de una ramita como las que ella misma ha entregado a los oficiales y guardias.
Un estilismo que la duquesa de Cambridge ha cerrado con un tocado tipo ‘pillbox’, uno de sus favoritos, del mismo tono que el abrigo, sobre un recogido bajo y unos salones negros de Gianvito Rossi. Como complementos, ha optado por unos pendientes de esmeralda y diamantes, además de su anillo de compromiso, que en su momento perteneció a Diana de Gales.
Más allá de su estilismo, Kate Middleton ha protagonizado una divertida anécdota durante la celebración, ya que ha tenido que condecorar con la rama de trébol a la mascota de la guardia, un perro lobero irlandés llamado Turlough Mor. Además, como es habitual en cada una de sus apariciones públicas, la duquesa se ha mostrado muy cariñosa con los niños presentes en el acto.