Juan Urdangarin, hijo de la infanta Cristina, revive su peor pesadilla entre rumores de ruptura, despido y mudanza

Juan, el hijo mayor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, se encuentra en la peor situación que jamás pudo imaginar

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

Juan urdangarin
GTRES

No sabemos nada de él. Juan Urdangarin, hijo mayor de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, ha sido siempre el más discreto de la familia. No es que sus hermanos se hayan prodigado mucho más, comparado con los primos Marichalar, pero Juan es un misterio. El hijo de la infanta Cristina siempre ha querido pasar desapercibido. Ajeno a la popularidad de su familia y con cierta alergia a la fama, el joven llegaba a mudarse fuera del país para así evitar ser reconocido.

Lo que nunca hubiese imaginado era que terminaría siendo el protagonista de la noticia. Los rumores situaban a Juan Urdangarin de nuevo en España. El hijo de la infanta Cristina habría abandonado Londres tras una ruptura sentimental que le atormentaría. Además, habría dejado de trabajar en la firma donde se encontraba solo un año después de haber sido contratado. Una tormenta perfecta que dejaba al hijo mayor de la infanta en volandas.

Urdangarin ha optado por tomar cartas en el asunto. El joven no quiere volver a pasar por el trauma que ya vivió cuando su padre se encontraba en pleno escándalo del caso Nóos. Los hijos de Urdangarin fueron víctimas de bullying y desprecios que les han marcado de por vida. Y Juan, siendo, el mayor, lo sintió peor que sus hermanos. En su memoria está grabado todo lo que pasó.

La situación real de Juan Urdangarin

Con intención de frenar todo lo que se está diciendo de él, el entorno de Juan Urdangarin ha querido romper su silencio. No hay ruptura ni tampoco despido. Así lo han contado a la revista ‘Hola’. “No tiene novia por lo que no puede estar pasando por una ruptura”, afirman. Juan habría viajado a España únicamente por vacaciones. El hijo de la infanta habría aprovechado las semanas de descanso para estar con sus hermanos en Bidart, en el País Vasco francés, su lugar de veraneo familiar.

“Ha pasado parte de sus vacaciones en España con su familia, pero no llorando en el hombro de sus seres queridos”, apuntan. Tampoco parece que este dolor haya sido por un motivo laboral. Según aseguran, Urdangarin va a continuar trabajando en la firma donde ha estado este último años. Es una empresa propiedad de Alejandro Agag, el yerno de José María Aznar. No parece que tenga intenciones de renunciar a ello, aseguran. Tampoco de abandonar Londres para regresar a España.

Juan no vivirá con su abuela, especifican a la citada publicación. No seguirá los pasos de su hermana Irene y de su hermano Miguel. El joven regresa a Londres y continúa con su vida tal y como la ha disfrutado este último año. “Quiere mucho a su país y está unidísimo a su abuela, a ambas, pero no hay cambio de planes”, especifica el entorno del joven. Con todo, su vida sigue siendo una incógnita.

El peor trance para Juan Urdangarin

Los hijos de la infanta Cristina no olvidan el tiempo que sufrieron durante el juicio de su padre. El estallido del caso Nóos puso a la familia en el disparadero. “La familia empezó a recibir desplantes, se negaban a darles albornoces en el Tenis Barcelona hasta que se les comunicó que se les revocaba el título de socios de honor, dejaron de invitar a los niños a las fiestas de cumpleaños, en las reuniones de padres del colegio se les llegó a afear su conducta y la infanta, que iba muchas veces a buscarlos personalmente, dejó de hacerlo”, explica Pilar Eyre en las páginas de la revista Lecturas.

“La vergüenza máxima fue cuando Iñaki acompañado de Juan, fue recibido al grito de “cuidado con los bolsos” en una panadería cercana a su domicilio. Su casa estaba rodeada de periodistas, alguna vez la infanta intentó salir con sus hijos, pero tuvo que volver a entrar porque los niños, asustados, se echaban a llorar”, recuerda la escritora. Un episodio que el hijo de Iñaki Urdangarin recuerda a la perfección y no quiere volver a repetir.

Si antes de todo el hijo mayor de la infanta Cristina ya no sentía demasiada afición a las cámaras, ahora es algo que no contempla. Juan prefiere permanecer en un plano discreto, sin excentricidades ni escándalos. Profundamente religioso y muy concienciado con el medio ambiente, es ahí donde dedica su profesión y su tiempo libre.

La extraña vida de los hijos de la infanta Cristina

La preocupación de la infanta Cristina por sus hijos es evidente. La hija de los reyes eméritos viaja de forma constante a Madrid para acompañarles, sobre todo a Irene, la pequeña. La benjamina de la familia terminaba su etapa en Ginebra y se instalaba en Zarzuela junto a su abuela. Allí aprovechaba para pensar en su futuro y sacarse el carnet de conducir. También para afianzar su romance con Juan Urquijo, cuñado del alcalde de Madrid.

Tras Irene era Miguel quien también se instalaba en Zarzuela. El hijo de la infanta sufría un accidente que truncaba su sueño de ser monitor de esquí -o eso nos han contado-. Para recuperarse, regresaba a España. Entre los rumores que corren, se sitúa también una posible relación con una joven residente en Madrid. ¿A qué se dedica en la actualidad? No lo sabemos.

Más claro está el futuro de Pablo Urdangarin. Es el único hijo que ha seguido los pasos de Urdangarin en el deporte y no le va nada mal. Pablo sueña con acudir a los Juegos Olímpicos y triunfar en el balonmano. Es, además, el más abierto y receptivo de los hijos de la infanta. Quien ha ejercido de portavoz cuando la familia ha pasado por momentos complicados.