Isabel II ha vivido un fin de semana de lo más ajetreado por la presencia de los líderes mundiales congregados en Reino Unido con motivo de la cumbre del G7, a quienes dio la bienvenida en el cordado de Cornaulles el viernes 11 de junio y, desde entonces, no ha parado. Recepciones oficiales, actos en solitario o acompañada, además de la celebración del Trooping the Colour, lo cierto es que la monarca ha tenido tiempo para todo.
La Reina ha mostrado su mejor cara en uno de sus momentos más complicados, tras la pérdida de su marido, Felipe VI, y las constantes disputas con Meghan Markle y el príncipe Harry. Así, la casa real británica ha dado una imagen de unidad que hacía mucho tiempo que no se veía, con Isabel II, Camilla de Cornualles y Kate Middleton como protagonistas.
Muy unidas, Isabel II, Camilla de Cornualles y Kate Middleton acudieron a The Big Launch (El gran almuerzo), un evento que tiene como fin fortaleza lazos comunitarios. Allí, demostraron la buena sintonía entre ellas. Es más, la monarca incluso se animó a cortar una gran tarta con una espada y la ayuda inestimable de la mujer de su hijo Carlos.
Muy sonrientes, las tres mujeres demostraron que, ante las últimas adversidades, están más unidas que nunca. Una icónica imagen con la que dejaron claro que no necesitan a Meghan Markle para nada. Es más, desde que los duques de Sussex pusieron rumbo a Estados Unidos, la popularidad de Kate Middleton no ha parado de aumentar en Reino Unido. Así, presente y futuro de la monarquía británica se han puesto a trabajar para que las disputas familiares a las que han tenido que hacer frente en las últimas semanas no pasen factura a la institución. Algo que han escenificado a la perfección este fin de semana.