Era una de las imágenes más esperadas de la Navidad y, por fin, el 25 de diciembre se produjo. Iñaki Urdangarin salía de la cárcel de Briera para disfrutar de su permiso penitenciario y acudía, junto a la infanta Cristina y sus hijos, a misa.
Todos disfrutaron juntos de la soleada mañana de Navidad dando un paseo. Un momento en el que Irene Urdangarin se convirtió en la inesperada protagonista. La hija de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina volvió a sorprender con su estilo y dejó claro, una vez más, que es una de las jóvenes ‘royals’ que mejor viste.
Lejos de los ‘looks’ relajados que suele mostrar en sus pocas apariciones públicas, Irene optó por la sobriedad con un conjunto blanco y negro muy acorde a la ocasión, ya que acudió junto a sus madres a misa. En clave masculina, la hija de la infanta Elena eligió para la ocasión un pantalón negro, un abrigo oversize del mismo color y un jersey de cuello cisne de canapé blanco. La joven remató su estilismo con unos mocasines.
La joven, que optó por recogerse el pelo, lució también unos largos pendientes con forma de hoja. Un accesorio que suele ser habitual en su prima Victoria Federica, quien también ha forjado su propio estilo a la hora de vestir.
Un estilo que choca con el de su prima Leonor. A pesar de que ambas tienen la misma edad y nacieron con tan solo unos meses de diferencias, las diferencias a la hora de vestir entre ellas es abismal. Aunque en sus últimos actos públicos la heredera al trono ha comenzado a introducir un estilo más juvenil, está muy distanciada de Irene Urdangarin.
Además de este distanciamiento en estilo, las jóvenes tampoco mantienen la buena relación de antaño. Algo que cambió drásticamente debido al escándalo que para la familia real supuso la imputación de Iñaki Urdangarin.