La peculiar condición que el príncipe Guillermo y Kate Middleton exigen para formar parte de su equipo de confianza

Poco a poco, parece que la Casa Real británica va retomando su normalidad. Aunque es imposible que todo sea igual que antes de los diagnósticos de cáncer de Carlos III (75 años) y Kate Middleton (42 años), la vuelta a la rutina y mostrarse como un frente unido han ayudado a dar una sensación de estabilidad. Algo muy necesario después de toda la polémica que persigue a los Windsor en los últimos meses, tanto sobre cómo se ha gestionado toda la 'desaparición' de Kate Middleton como su relación tirante con el príncipe Harry.

Para lograr esta naturalidad y equilibrio, todos los royals ingleses han tenido que seguir una hoja de ruta muy concreta y rodearse de un equipo de profesionales eficaces, que conocen a fondo la monarquía británica. Es por eso que el príncipe Guillermo (41 años) y Kate han empezado a buscar a su próximo Secretario Privado Adjunto para Gales y el Reino Unido. El principal objetivo de esta figura sería maximizar su impacto en Escocia, Irlanda del Norte y particularmente en Gales.

Una búsqueda de la que se han hecho eco todos los medios de comunicación británicos, que han compartido la propuesta laboral que el Palacio de Kensington ha publicado en su página web. "Esta es una oportunidad emocionante para unirse al equipo dedicado del Palacio de Kensington, que apoya a Su Alteza Real el Príncipe y la Princesa de Gales", comienza la descripción.

Las funciones y la habilidades que Guillermo y Kate Middleton buscan en su nuevo secretario

Trabajar para una de las casas reales más importantes del mundo implica tener una formación excelente, una experiencia intachable... y alguna que otra condición un tanto peculiar. El texto emitido por la oficina de los príncipes de Gales explicaba, concienzudamente, las funciones que el nuevo secretario debería ejercer en su día a día.

"El Secretario Privado Adjunto para Gales y el Reino Unido dirigirá la planificación y la ejecución de la mayoría de los compromisos públicos de Su Alteza Real en Gales, Escocia e Irlanda del Norte, y contribuirá al desarrollo de la estrategia de la Casa Real para maximizar el impacto en las naciones constituyentes del Reino Unido, con especial atención a Gales", se puede leer. Un cargo de peso ya que de sus acciones dependerá la imagen de los royals ingleses en esas regiones.

Para ello, dicha persona deberá contar "con capacidad demostrada para entablar relaciones productivas con una amplia gama de personas e instituciones. Deberá tener un enfoque proactivo y práctico al trabajar en un equipo pequeño y ágil, y un sólido conocimiento de las comunidades, los asuntos, el gobierno y los negocios galeses", enumera el Palacio de Kensington. El límite para presentarte a esta oferta era hasta el final de esta misma semana, cuando se cerrará el plazo.

La inusual condición para trabajar con Guillermo y Kate

Y, precisamente, con el objetivo de llevar a cabo de la mejor manera posible su cometido, el candidato o candidata deberá cumplir una inusual condición. "Es fundamental hablar galés conversacionalmente con fluidez", se indica. Esta exigencia por parte de Guillermo y Kate no es aleatoria. Los príncipes de Gales son conscientes que la relación entre la Casa Real británica y algunas zonas de habla galesa no siempre ha sido fluida. Por ello, quieren trabajar, mano a mano, con una persona que entienda las complejidades de dicha lengua y que pueda conectar de una manera profunda con los ciudadanos de dichas regiones. Eso sí, ellos también se están esforzando.

Como ya hizo el rey Carlos III antes de realizar su ceremonia de investidura para el título de heredero al trono, Guillermo reconoció hace algunos meses, tras la muerte de la reina Isabel II, que estaba aprendiéndolo. Fue en su visita oficial a las localidades de Anglesey, donde una vez vivieron como recién casados él y su esposa, y Swansea cuando explicó que el reverendo Steven Bunting le estaba ayudando con el proceso. 

¿Cómo llaman los trabajadores a Guillermo y Kate?

En los últimos meses, el príncipe Guillermo y Kate Middleton también han llamado la atención con temas referentes a su equipo de trabajadores. Por ejemplo, 'British Heritage Travel' publicó hace algunas semanas el divertido apodo con el que los profesionales de seguridad de los príncipes de Gales le pusieron a la pareja que incluyen un código secreto.

El motivo de estos motes no es una cuestión despectiva, sino para salvaguardar su identidad. Al fin y al cabo, el equipo de seguridad de estos royals debe seguirlos a cada hora de cada día de cada semana, así que es mejor hablar en clave para referirse a dónde estarán y qué están haciendo. ¿Y cuáles son esos pseudónimos? Daphne Clark para Kate y Danny Collins para Guillermo.

La razón tiene mucha lógica: las iniciales de dichos nombres son D y C en referencia a Duques de Cambridge, el título que la pareja ostenta desde hace años. Eso sí, esto fue antes de que falleciera la reina Isabel II, cuando solamente eran duques de Cambridge y no príncipes de Galés.

Una experta en lenguaje corporal revela cómo se encuentra Kate Middleton tras su última aparición

Dos días antes de 'Trooping the Colour', Kate Middleton emitió un comunicado en el que anunciaba que sí asistiría a este evento tan importante para la Casa Real británica. Uno que ahora doblaba en importancia por su primera aparición tras más de seis meses de ausencia. Verla fue una alegría y disipó las preocupaciones de los ciudadanos, algo que ha continuado sucediendo en sus siguientes reapariciones.

Por ejemplo, el domingo pasado Kate asistió al torneo de Wimbledon para entregar el galardón al ganador. Un momento en que todos los ojos se fijaron en ella. Para descubrir cuál era su estado anímico, Traci Brown, experta en lenguaje corporal analizo todos los gestos de la princesa hasta que llegó a una conclusión. “Esa es una sonrisa real. Ella sonríe con los ojos, no solo con la boca, eso es lo que sabemos. Así que este es un gran momento para ella”, afirmaba al medio 'The List'.