Los cambios siempre llevan un tiempo de adaptación. A principios de octubre la secretaria de comunicación del príncipe Harry y Meghan Marke decidió dejar su puesto de trabajo. Para los duques de Sussex supuso un duro golpe que una de las personas en las que más confiaban dejara de formar parte de su equipo. Pese al contratiempo que suponía para ellos se mostraron de lo más comprensivos. Samatha Cohen se iba de su lado para trabajar en algo con lo que Harry y Meghan están muy comprometidos. Desde que se fue de Frogmore Cottage, la mujer está vinculada a una organización medioambiental y trabaja en la lucha contra el cambio climático, en la protección del ecosistema y con otros temas que tienen a la naturaleza y el ecologismo como protagonistas.
Para sustituirla llegó a su equipo Fiona Mcilwham. La nueva jefa de comunicación de los duques de Sussex se enfrentaba a una situación complicada. Trabajar para una de las parejas más influyentes de la familia real británica, sustituir a una persona que lleva casi veinte años trabajando para la familia de Isabel II y hacer frente a una situación de crisis del matrimonio eran algunos de los obstáculos con los que se encontraba desde el primer día. Y su acogida y adaptación han sido sorprendentes.
En menos de dos meses se puede decir que Fiona se ha adaptado a la perfección a su puesto y que Harry y Meghan están encantados con ella. Confían al cien por cien en las decisiones que toma su nueva jefa de comunicación, ella ya ha acudido a varios eventos junto a ellos y estas semanas en las que los duques de Sussex se están tomando para descansar están siendo determinantes para que ella reorganice parte de la estrategia para que a su vuelta logren paliar las críticas. Además con su fichaje el matrimonio vuelve a demostrar su lado feminista, haciendo que varias mujeres ocupen puestos importantes en sus equipos de trabajo.