El príncipe Guillermo también está en etapa de cambio. La proclamación de su padre como rey Carlos III de Inglaterra y la de él como heredero al trono también han cambiado su hoja de ruta. Carlos III de Inglaterra ha nombrado a su hijo mayor príncipe de Gales y esto le ha llevado a tomar su primera decisión, que también afecta a su esposa, Catalina, ahora princesa de Gales.
Tras su encuentro con su hermano Harry y Meghan Markle, el príncipe de Gales ha mantenido una conversación telefónica con el primer ministro de Gales, Mark Drakeford, y el Palacio de Kensington ha publicado un comunicado con los planes del matrimonio. En esta conversación, los príncipes de Gales han recordado con cariño su primer hogar en Anglesey donde vivieron con su primogénito, el príncipe George.
"El príncipe y la princesa profundizarán su relación con Gales en los próximos meses y años. Quieren poner de su parte para lograr las aspiraciones de su pueblo y dan mucha importancia a los desafíos y oportunidades que tienen por delante. Esperan celebrar la historia y tradiciones de Gales así como un futuro muy prometedor", dice este comunicado. El príncipe Guillermo quiere seguir con la tradición de su padre y la familia real británica y está expectante con esta nueva etapa.
"He perdido una abuela. Y, aunque lamentaré su pérdida, también me siento increíblemente agradecido. He contado con su sabiduría y mi esposa también ha tenido veinte años de guía y apoyo", dijo el príncipe Guillermo en su primer comunicado tras la muerte de su abuela, a la que estaba muy unido. Pero las obligaciones de la corona pesan y tanto el rey Carlos como el nuevo príncipe de Gales ya están manos a la obra con su trabajo y funciones dentro de la casa real británica un trabajo que jamás descuidó la reina Isabel II.