El príncipe Carlos de Inglaterra ha dado positivo por coronavirus. Por el momento, los síntomas que padece son leves, por lo que su estado de salud no reviste gravedad. El heredero al trono británico, de 71 años de edad, se encuentra pasando la cuarentena en el castillo de Balmoral, en Escocia, donde también se encuentra su mujer, la duquesa de Cornualles, quien ha dado negativo en la prueba para detectar si también había sido infectada.
La situación por el coronavirus ha hecho que Guillermo de Inglaterra haya tenido que asumir un nuevo papel en la casa real. Y es que cabe recordar que la reina Isabel II permanece en aislamiento preventivo, junto al duque de Edimburgo. La monarca pertenece a un grupo de riesgo, el de las personas mayores, por lo que la semana pasada fue trasladada del palacio de Buckingham, en pleno centro de Londres, al castillo de Windsor, su segunda residencia situada a pocos kilómetros, unos 40, de la capital inglesa. El príncipe Carlos, debido a su edad también pertenece al grupo de riesgo frente al COVID-19, por lo que en los últimos días también había estado alejado de la vida pública.
Algunos expertos en realeza de Reino Unido percibieron, la semana pasada, que Isabel II había delegado sus funciones en su nieto el príncipe Guillermo. Por un lado, el hijo mayor del príncipe Carlos fue el encargado de acudir a los últimos actos oficiales, antes de que fuesen cancelados como medida de prevención ante el coronavirus. Por otro, el príncipe Guillermo fue el primer miembro de la corona británica en transmitir un mensaje en vídeo refiriéndose a la situación del COVID-19.
El hijo mayor del príncipe Carlos, a través de un vídeo publicado en la cuenta de Instagram de los duques de Cambridges, destacó la importancia de la labor de quienes están trabajando para frenar la pandemia y ayudando a los enfermos. Además, hizo un llamamiento a la responsabilidad ciudadana para hacer frente a la crisis del coronavirus.
Carlos de Inglaterra e Isabel II no son los únicos miembros de la corona británica que se han marchado de Londres por la crisis del coronavirus. Guillermo y Kate también han dejado la capital británica y se han trasladado a su casa de Anmer Hall, en Norfolk.