Durante los meses de verano hemos visto a los reyes Felipe VI (56 años) y Letizia (51 años) asistir a algunos de los actos más relevantes de su agenda, como los Premios Princesa de Asturias, los Mariano de Cavia o el tradicional posado en el Palacio de Marivent. A estos se le suma un acontecimiento inusual: los Juegos Olímpicos. Los monarcas y sus hijas, la princesa Leonor (18 años) y la infanta Sofía (17 años) anunciaban que acudirían a algunos de los torneos de la delegación española en París. Y, por supuesto, las vacaciones privadas de la familia real que parecen haber llegado a su fin.
Eso sí, todo evento está cuidadosamente planificado de antemano por la Casa Real. Nada se deja al azar. Y es que cuando los reyes viajan, ya sea al extranjero o dentro de nuestras fronteras, deben seguir unas estrictas normas de protocolo. Pilar Eyre, escritora, ha revelado en su blog para la revista Lecturas el gran despliegue de seguridad que se lleva a cabo cuando los monarcas están de vacaciones.
Las medidas de seguridad que deben seguir los reyes Felipe VI y Letizia
La periodista ha revelado que, aunque no lo veamos, cada aparición de Felipe y Letizia está acompañada de unas grandes medidas de protección. Concretamente, Eyre se refiere a los días de descanso privado que los reyes y sus hijas disfrutan una vez se marchan de Mallorca. Aunque no sabemos a qué destino han acudido para desconectar de sus obligaciones, Pilar sí tiene claro las medidas que han tenido que seguir.
"Tiene que estar el Ministerio del Interior y los cuerpos de seguridad preparados por si acaso. Si hubieran estado juntos (también con Leonor y Sofía), el otro día estuve hablando con un especialista en estos temas, dice que hubieran necesitado al menos a 50 personas de escolta, seguridad y vigilancia porque son turnos", cuenta la comunicadora en su canal.
Unos profesionales que les siguen "24 horas, siete días a la semana" y que deben organizar también varios permisos y su descanso. "Las personas necesitan dietas de desplazamiento, permiso de armas para el extranjero. Necesitan regular todo este tipo de operativo y muchos meses para hacer", desvela Eyre.
Además, en el caso de los viajes internacionales, "se tiene que estar de acuerdo con las embajadas de los países que se van a visitar y coordinar también con los servicios de seguridad de donde vayan. Es un operativo muy complicado que tienen que preparar varios meses antes", ha continuado la comunicadora. En lo que se refiere a estas personas que protegen a los reyes tienen permiso para informar a sus familias, "por lo que los únicos que no lo sabemos somos los españoles, que no tenemos ni idea. Solo hacemos cábalas y avistamientos", afirma, algo indignada.
Las otras exigentes normas que acatan Felipe y Letizia en sus viajes al extranjero
Este despliegue de seguridad no es lo único que marca los viajes de los monarcas, especialmente los que tienen lugar fuera de España. Al menos hay varias reglas que son inamovibles y que deben mantenerse a lo largo de todo el desplazamiento internacional. Una de las más llamativas, de la que ya hablamos hace algún tiempo, es la disposición de bolsas de sangre. Según el protocolo médico, debe haber una reserva de sangre, del grupo sanguíneo de los reyes, totalmente disponible que se pueda usar de forma inminente en caso de ser necesario. Así, tal como informó en su momento 'La Gaceta de Salamanca, estas bolsas viajan con los monarcas allá donde vayan durante toda la planificación.
Otra norma sanitaria es la que obliga a tener reservada una habitación en el hospital más cercano a su alojamiento, tanto en el área de urgencias como de ingresos. La razón es obvia: en caso de necesitar una rápida intervención, los reyes podrán acceder rápidamente a los servicios médicos. Para llegar hasta estas habitaciones se gestiona también una ambulancia dedicada exclusivamente para Felipe y Letizia.
También, el programa 'Fiesta' comentó otro protocolo que se supone que deben seguir para garantizar la seguridad. "Siempre que tienen que comer comida fuera de palacio, hay un equipo real previo que lo prueba o prepara para evitar envenenamientos", explicó un colaborador del programa de Emma García.
Menos cruciales que las anteriores, pero muy importantes para el bienestar de los reyes hay otras medidas. Por ejemplo, en sus viajes de Estado, como el que realizaron recientemente a Holanda o el de hace unos meses a Dinamarca, Felipe y Letizia se alojan en una planta completa, con una sala y baño únicamente para ellos. Una norma vinculada a la privacidad de los monarcas, que tras varios días expuestos al ojo público quieren relajarse en la intimidad de sus aposentos.