Podríamos decir que la familia real ha estado ocupada estos últimos meses. La princesa Leonor (18 años) ha sido la protagonista indiscutible de octubre, con una serie de actos vinculados a su formación en la academia militar, como la jura de la bandera en el Día de la Hispanidad o la ofrenda a la Virgen del Pilar con sus compañeros, así como otros momentos clave en su trayectoria como heredera al trono. El ejemplo más claro es la jura de la Constitución el día en que alcanzaba la mayoría de edad, al que se suman los Premios Princesa de Asturias.
Pero no ha sido la única. Sus padres, el rey Felipe VI (55 años) y la reina Letizia (51 años), su abuela reina Sofía (85 años) o su hermana la infanta Sofía (16 años) también han acaparado la atención del foco mediático. Unos compromisos en los que los miembros de la familia real se han tomado la licencia de saltarse las férreas normas que la reina Letizia ha implantado desde su llegada a Zarzuela. Unas reglas que afectan tanto a la alimentación como al ocio e intimidad de sus miembros. ¿Cuáles son? Las descubrimos.
La famosa y estricta dieta de la reina Letizia
Que Letizia es una defensora de la vida saludable no es ningún secreto. La madre de Leonor y Sofía ha demostrado en más de una ocasión su interés por la alimentación y hábitos de vida saludables con la finalidad de mantener un cuerpo sano y firme. Tanto es así que, cuando llegó al Palacio de la Zarzuela, se implicó personalmente en los menús de su familia. Que alimentos están permitidos, cuáles es mejor evitar, las cantidades exactas. Una serie de pautas que la monarca que la monarca habría marcado al detalle.
Y no solo en casa. La que fuera periodista de TVE se plantó en el colegio al que acudían sus hijas para asegurarse que la comida que les ofrecieran fuera la mejor posible. Pero, ¿Cuál es esa dieta? Se trata de la dieta Perricone, que se basa en consumir muchas proteínas saludables, lácteos bajos en grasa, verduras, legumbres y frutas, así como otro tipo de alimentos antioxidantes y antiinflamatorios. También tiene algunos alimentos totalmente prohibidos, como la pasta, el arroz, los dulces, los refrescos, los fritos y las harinas. En definitiva, buena parte de los hidratos de carbono que todos consumimos en nuestro día a día.
Un hecho reciente que demuestra que la reina sigue muy pendiente de la alimentación de sus hijas es cuando compró la bebida favorita de sus hijas, muy saludable y saciante. Fue en la Feria de Biocultura que tuvo lugar en Ifema hace unas semanas. Tras pasear por los 400 stands del evento y descubrir nuevos productos, Letizia realizo varias compras: una botella de aceite de oliva con romero, paté de hígado ecológico, unos pendientes de plata y té Matcha. Sería esta última bebida la predilecta de sus hijas.
Letizia, una gran apasionada del deporte
El gusto de Letizia por una vida saludable no se detiene solo en su alimentación. La reina es una apasionada del deporte, con el que cuida de su figura y salud. La monarca entrena con asiduidad, combinando ejercicios de fuerza y cardiovascular para ponerse en forma y mantener su cuerpo estilizado.
¿Y qué tipo de entrenamiento llevaría a cabo? Pues uno de ellos sería a partir de la escalada. 'La Razón' publicó hace algún tiempo que la monarca habría hecho instalar un rocódromo en el palacio de la Zarzuela para así practicar libremente este deporte. Otro de los ejercicios básicos de la esposa de Felipe es el yoga, así como los ejercicios centrado en ejercitar los brazos, la espalda y las piernas, tonificando así todo su cuerpo.
La reina Letizia rechaza el alcohol
El saber estar de la reina Letizia ha hecho que apenas se note que no prueba una gota de alcohol. No obstante, si nos fijamos en los últimos almuerzos y cenas a las que ha acudido, vemos que la esposa de Felipe VI solo bebe de su copa para brindar y mojar los labios. Uno de los eventos más recientes donde vimos esto fue en el almuerzo en honor a la mayoría de edad de Leonor, tras su jura de la Constitución. Allí, doña Letizia alzó su bebida para brindar, al acabar el discurso del rey, pero solo tocó el brebaje brevemente y bajo la copa. De hecho, estaba más pendiente de la reacción de su hija al probar, de la misma forma, el champan.
Tambi��n vimos la misma reacción en la cena que le ofrecieron los miembros de la Casa Real danesa en su visita oficial a Dinamarca. La reina, que vivió un momento 'tierra trágame' al ser sentada al lado de Federico de Dinamarca, de nuevo cogió su elegante copa y sonrió mientras todos los comensales brindaban. Ella, sutilmente, mojo de nuevo sus labios y nada más.
La reina Letizia protege ferozmente la intimidad de sus hijas
A pesar de que Leonor y Sofía forman parte de una institución pública y conocida por todos, Letizia tenía claro que sus hijas debían crecer como dos niñas normales. Es por eso que la nuera de la reina Sofía ha protegido durante muchos años la privacidad e intimidad de sus hijas. Apenas aparecían en actos públicos y no se sabía nada de sus gustos ni aficiones.
Además, la reina habría establecido un código de conducta para sus hijas, siguiendo el protocolo real. Serenas y calmadas, Leonor y Sofía no pueden mostrarse alteradas por ninguna situación. Tampoco pueden aceptar regalos en público de nadie. Su deber es el de transmitir estabilidad y calma. Por no hablar de algunas de las normas más educacionales, como que no podían ver la televisión de lunes a viernes, ni jugar con la 'tablet'. Una información que la propia monarca dio hace años en la jornada 'Presencia femenina en puestos de alta dirección'.