El escollo inesperado de la reina Margarita: Federico de Dinamarca y Genoveva Casanova arruinan sus planes

Desde que la revista Lecturas publicó, en exclusiva, las fotografías de Federico de Dinamarca (55 años) y Genoveva Casanova (47 años), la familia real de Dinamarca está en el centro de todas las miradas. La actitud del heredero al trono y Mary Donaldson la misma noche que salió la exclusiva o los apoyos de algunas monarcas europeas a la princesa danesa son algunos de los temas que han ocupado la actualidad. Uno de ellos, quizá el más importante, es cómo se ha posicionado la Casa Real de Dinamarca frente a este escándalo.

Fueron los primeros en emitir un comunicado tras conocerse el encuentro entre Federico y Genoveva. Posteriormente, la reina Margarita rompía una tradición al prohibir la entrada a la prensa en la jura de la Constitución de su nieto Christian, hijo de Federico y Mary. Un hecho que se repetirá el próximo 16 de noviembre, en la cara a la cacería real anual en los bosques de Gribskov. Gestos que pretenden alejar a su hijo del revuelo mediático.

Una postura de protección y discreción, que se adhiere al carácter equidistante de la familia real danesa. No hay quejas, no hay críticas. Nada que pueda ensuciar la imagen del heredero. No obstante, a pesar de esta actitud, las imágenes del príncipe con la mexicana ya han afectado a la monarquía danesa. Concretamente, el encuentro de Federico y Genoveva ha creado un escollo en los planes de la reina Margarita sobre su sucesión. Era ayer cuando Luis Pliego, director de Lecturas, desvelaba en 'Tarde AR' cómo las instantáneas en Madrid habían desmoronado los planes de la monarca. “He hablado con muchos periodistas daneses esta semana. Se han hecho eco de la portada pasada”, comentaba Pliego, nada más comenzar.

Estos no dudaron en expresar su opinión sobre el futuro del matrimonio del rey, pero lo que sí destacaron es que hasta el pasado miércoles había varios planes sobre la mesa: "estaba preparando la abdicación de Margarita para que él asuma el trono, pero todo esto lo ha parado”. Y es que con todo el foco mediático centrado en Federico y los detalles que se van sabiendo a medida que pasan los días, los objetivos de Margarita respecto a su sucesión se han complicado y tardarán más de lo que pensaba en aplicarse.

El blindaje de la Casa Real de Dinamarca en torno a Federico

"Mantenemos una política desde hace años de no comentar ni confirmar cualquier detalle relacionado con asuntos privados. Además, nos gustaría enfatizar nuestro compromiso de respetar la privacidad de los miembros de la Familia Real, incluido el Príncipe Heredero". Así se pronunció la familia real danesa cuando se hicieron públicas las imágenes de Federico y Genoveva. Con unas pocas líneas, la monarquía danesa incidía y zanjaba el asunto, dejando claro que no iban a hablar del tema.

Pero no se quedo ahí. La reina Margarita, que siempre ha permitido el acceso de los medios de comunicación a sus actos y se ha mostrado cercana prohibía su entrada en la jura de Constitución de su nieto. Lo mismo hacía con la  cacería real anual en los bosques de Gribskov. El medio danés ‘BT’ contó, según recoge 'Vanitatis', que será la Casa Real de Dinamarca la que se encargue de hacer las fotografías y que encargarán de distribuirlas. Pero esta vez no habrá fotógrafos de prensa que puedan acceder al evento y encargarse de tomar las imágenes.

Una decisión que ha enfadado a los periodistas daneses. 'Semana' ha informado que no permitir a la prensa acceder a la caza ha generado cierta tensión con los reporteros. "Esto nos ha molestado. En los últimos 15 años iban fotógrafos a la isla de Selandia, al este del país, pero de repente les blindan y nos dicen que no. Serán ellos quien distribuya las fotos", cuenta este periodista de uno de los medios más reputados de Dinamarca.

Mary Donaldson continúa con su agenda a pesar de la polémica

El paseo y cena de Federico y Genoveva no solo ha atraído las miradas hacia ellos sino también hacia Mary Donaldson, la esposa del príncipe y madre de sus hijos. Cuando se supo la noticia, la australiana cambio su actitud, alegre y habladora, de las últimas horas con los reyes de España, a un gesto serio y tenso aderezado con dos gestos que delataban su inquietud. Una vez Felipe VI y Letizia se marcharon del país, Mary desapareció, resguardándose de miradas y comentarios.

No obstante, ayer era un día clave que Mary no podía eludir: la jura de Constitución de su hijo Christian en el Castillo de Christiansborg. Un día clave no solo por lo que implica para la trayectoria institucional del joven, sino también por ser un día histórico: es la primera vez que tres generaciones han coincidido al mismo tiempo en el Consejo de Estado.

A pesar de que la reina Margarita prohibió la presencia de la prensa en el acto solemne, hemos podido saber que Mary acudió al evento gracias a las redes sociales de la Casa Real. Más tranquila y serena que la última vez que la vimos, Donaldson ha entrado en el castillo para estar al lado de su hijo, dejando de lado la polémica exclusiva de Lecturas. Su presencia consolida la idea de tranquilidad y discreción que la familia ha transmitido desde el principio.