Cada imagen de Mary Donaldson (51 años) es noticia. Desde que Lecturas publicó las imágenes de Federico de Dinamarca (55 años) disfrutando de una velada privada con Genoveva Casanova (47 años) por Madrid, la pareja está en el ojo del huracán. Las instantáneas han puesto en jaque su matrimonio, especulaciones que cogen fuerza con la determinación de la casa real danesa de blindar, como nunca antes, a la australiana.
Desde que todo saltara por los aires el pasado 8 de noviembre, las apariciones de Mary han sido contadas y, la mayoría de ellas, sin la presencia de la prensa. De esta manera, la institución pretende proteger a la mujer de Federico en uno de los momentos más delicados de su vida, y es que tal y como apunta la prensa local, su matrimonio hace frente a una crisis que tratan de superar por el bien de la Corona.
Así habló la reina Mary de su depresión
Apenas tres semanas después de la publicación de las fotografías, Mary Donaldson reapareció públicamente y lo hizo por la puerta grande, concretamente en televisión. La entonces princesa participó este verano en el programa 'La naturaleza y nuestra mente', un espacio centrado en la salud mental que se emitió el 30 de noviembre.
Orgullosa con su participación en este espacio televisivo, que habla de naturaleza y salud mental, desde la Casa Real no dudaron en promocionar el programa junto a un texto explicativo de lo que se iba a ver en el documental donde Mary charló animadamente con tres desconocidos que han atravesado una etapa muy complicada.
Lo que nadie esperaba es que el mismo texto revelara que Mary Donaldson había sufrido depresión. "La princesa heredera ha trabajado durante muchos años para combatir la depresión y centrarse en la salud mental", citan textualmente sin dar más información al respecto. "Al mismo tiempo, la naturaleza -y la importancia de cuidarla- es una parte esencial de la vida y el trabajo de la princesa", concluyeron.
Parece casi una "normalidad" que los miembros de las casas reales sufran este tipo de enfermedades mentales. Imposible olvidar la depresión que arrastra la princesa Masako desde hace años, sumada a Charlene de Mónaco, Victoria de Suecia o la desaparecida Lady Di.
Tal y como se podía ver en el resumen, Mary paseaba por la orilla de la playa mientras charlaba con el doctor y presentador de televisión Peter Qvortrup Geisling. Lejos de cualquier tipo de ostentación, la australiana recurrió a un estiloso total denim compuesto por camisa y pantalón palazzo, al que dio su toque personal con un mini cinturón camel y chaqueta azul marino. Un outfit informal al que no nos tiene nada acostumbrados que cerraba con unos cómodos botines nude.
¿Cuándo tuvo lugar la depresión de Mary?
En el aire ha quedado por resolver una importante cuestión: ¿Cuándo exactamente la reina Mary hizo frente a este problema con su salud mental? ¿Ha sido algo cosa reciente? ¿Conocía Federico ya Genoveva Casanova cuando su mujer atravesó esta complicada situación? Una información que la Casa Real danesa parece haber querido preservar en la intimidad de Mary.
De Masako a Charlene de Mónaco: las royals no esconden sus problemas de salud mental
Aunque parezcan ajenos a todo, lo cierto es que son muchos los reyes y príncipes que han tenido que hacer frente a diferentes problemas de salud mental en momentos delicados de su vida. La princesa Masako (59 años) fue apartada de la vida pública en 2004 a consecuencia de una fuerte depresión. En ese entonces la Casa Imperial lo justificó como "estrés", pero lo cierto es que la mujer de Naruhito sufrió una gran presión por no dar a luz a un heredero varón lo que le llevó a estar sumida en una dura de enfermedad mental contra la que sigue batallando.
Charlene de Mónaco (45 años) fue bautizada nada más casarse como "la princesa triste", un apelativo que lejos de eliminarse iba cogiendo más auge con el paso de los años. Su prima Christa Mayhofer-Dukor confesó que había sufrido una etapa muy complicada antes de dar a luz a sus mellizos, enfermedad que resurgió hace solo unos años a consecuencia de la dolencia que la llevó a estar recluida en Sudáfrica más de un año.
Conocida por todos es la depresión que sumió a Lady Di en un infierno, enfermedad mental que años después su hijo Harry aseguró haber sufrido cuando era solo un niño. Esto es solo un ejemplo de los estragos que genera la vida real en algunos de los miembros de la realeza.