Los reyes Felipe VI (56 años) y Letizia (51 años) tienen una agenda la mar de ocupada. Apenas terminó el verano, los monarcas se pusieron manos a la obra acudiendo a sus primeros compromisos oficiales, desde reuniones hasta entregas de premios. Eso sí, además de actos oficiales, los padres de la princesa Leonor (18 años) también tienen citas personales. Algunas más alegres que otras. Eso sí, hay dos tipo de acontecimientos a los que la reina no acude jamás, dejando solo al rey.
Precisamente, en los últimos meses hemos visto un ejemplo de esto mismo con la boda de Victoria López-Quesada y el funeral de Fernando y Juan Gómez-Acebo. En el primer caso, el monarca aparecía en la ceremonia junto a su hermana la infanta Cristina y buena parte de su familia. Pero ni rastro de Letizia. Cierto es que la reina se encontraba en París apoyando a la selección española de los Juegos Paralímpicos, pero no deja de ser extraño que Letizia falte a la boda de la ahijada del rey.
En el segundo caso, lo vimos claramente con el fallecimiento de Juan Gómez-Acebo. Después de su muerte el pasado 12 de agosto tras una larga enfermedad, la familia decidía organizar un entierro y funeral en septiembre, cuando todos pudieran acudir. Alrededor de las 12.00h, Felipe llegaba a la Catedral Castrense de Madrid para participar en una misa en honor de su primo y luego se trasladaba hasta el cementerio de San Isidro de la capital. El hecho de llegar solo sorprendía a los presentes y medios, ya que todos esperaban la presencia de la madre de la infanta Sofía.
En este sentido, esa misma tarde, durante una multitudinaria misa homenaje al fallecido en la Iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas de Madrid, sí que apareció Letizia. De esta manera, parece ser que la monarca evita los actos íntimos y familiares, mientras que no tiene reparo en ir a los más oficiales. El motivo es desconocido, pero podría tener que ver con la tensa relación que ha existido con la familia de Felipe desde hace años. Siempre muy perfeccionista y centrada en su trabajo no deja ver su lado más personal ni en los eventos familiares y de carácter personal más importantes.
La cita más especial para la reina Letizia: su vuelta al periodismo
Aunque la reina Letizia siempre lo da todo en cualquiera de sus actos agendados, es cierto que hay algunos más especiales que otros. Un ejemplo fueron los recientes Premios Mariano de Cavia, Luca de Tena y Mingote, que premian el talento de periodistas, profesión que la reina conoce muy bien y que forma parte de su corazón. En esta línea, hoy la nuera de la reina Sofía ha asistido a la presentación del servicio ‘Radio Nacional para Todos’ con motivo de una iniciativa para dar visibilidad a la necesidad de hacer accesible la radio en directo para las personas con discapacidad auditiva.
Vestida con un traje, con el que ha recordado a su etapa como presentadora, Letizia se ha mostrado muy cómoda y en su salsa durante todo el evento. Dejando de lado la polémica generada en los últimos días por las fotos del rey Juan Carlos con Bárbara Rey y sus memorias, Letizia se ha mostrado carismática, centrada y muy comprometida con los motivos del acto. Nada más llegar ha saludado, de forma efusiva, a las autoridades y profesionales e incluso nos ha regalado un gran momento al ponerse al frente de los micrófonos de la Radio Nacional de España.
El fin de semana familiar de los reyes Felipe y Letizia con la princesa Leonor
Este acto ha llegado justo después un gran fin de semana. Los reyes se desplazaban hasta Marín, localidad donde se encuentra la Escuela Naval, para pasar un tiempo en familia con su primogénita, la princesa Leonor (18 años). Sonrientes y cómplices, la familia real se mostraba encantada con reunirse de nuevo. Mientras que la princesa lucía su uniforme académico, sus progenitores escogían unos outfits muy casual para la ocasión.
Esta visita llegaba en un momento, como mínimo, curioso. Justo unas horas antes se había producido el breve encuentro entre Leonor y su abuelo paterno, el rey emérito Juan Carlos. A pesar de todo el escándalo que lo rodea, el marido de la reina Sofía se desplazaba hasta la academia para ver a su nieta y futura heredera de la Corona tras mucho tiempo sin verse las caras.
De esta manera, tras trascender el encuentro entre abuelo y nieta, no es de extrañar que los reyes hayan querido limpiar esa imagen, dejando claro quién forma parte de la familia real. Unas imágenes para dejar de lado la imagen mental del emérito junto a la heredera en una de sus semanas más polémicas. En definitiva, Felipe y Letizia, como llevan haciendo muchos años, han querido proteger a su primogénita de habladurías y comentarios.