Irene de Grecia (81 años) es la pequeña de sus tres hermanos; y, quizás por eso, su hermana Sofía (84 años) siempre la quiso proteger. Siempre pendiente de ella, siempre cuidándola. Y, de un tiempo a esta parte, más aún. Y es que, tal y como ha podido saber la revista Lecturas, a la princesa griega “se le están borrando los recuerdos”.
La hermana de la reina Sofía padece el mal del olvido, tal y como ha podido saber nuestra revista; lo que ha provocado que se le desdibujen los recuerdos de todo aquello que vivió en su infancia y en su juventud. Pero, es más, los rostros de sus seres queridos; también se vuelven confusos y poco claros.
Desde que falleció su madre, Irene de Grecia se marchó a Zarzuela; donde es una más. Siempre al lado de su hermana, siendo, prácticamente, su sombra. Las dos un pack indivisible; donde va una, va la otra. Cada noche cenan juntas y comparten rutinas en Palacio, donde las dos viven en la misma planta.
Corren tiempos amargos para la reina Sofía. Este mismo año ha despedido a su hermano Constantino, el mediano de los tres, y, ahora, se enfrenta al mal de su hermana Irene; tan cruel y dolorosa. Pero ella se mantiene fuerte y cariñosa. No se separa de ella. Más aún. Siempre la ha cuidado y ahora extrema estos cuidados. Lo hace porque la quiere y porque es esencial para ella. A lo largo de todo su reinado, su hermana ha sido su sombra, su apoyo esencial en un segundo plano.
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