El rey Felipe cada vez más lejos de Letizia: el círculo íntimo con el que hace planes sin la reina

La agenda de compromisos del rey Felipe VI (55 años) es imparable. El monarca hace frente, con su entereza habitual, a todo tipos de actos y eventos. En algunos acude en solitario, y a otros junto a su esposa y reina consorte, doña Letizia (51). Cuando todas estas obligaciones institucionales cesan, al rey le gusta pasar tiempo con su esposa y con sus hijas, como un padre normal. Más que conocidas son las citas que los monarcas siguen teniendo para mantener vivo su amor. Eso sí, cuando no está con ella, Felipe disfruta haciendo planes con su círculo de amigos más cercano. Pero, ¿quiénes son estos amigos con los que el rey pasa su tiempo libre? Lo averiguamos.

De la misma manera que vimos a la reina acudir a la firma de libros de su amiga, Sonsoles Ónega o su asistencia al coloquio de Martin Scorsese, el padre de Leonor (18 años) también ha llevado a cabo varias salidas a título personal. La más reciente ha sido la escapada a Baqueira Beret a esquiar y disfrutar de la gastronomía de la zona. Eso sí, no ha estado solo. Felipe se ha rodeado de amigos íntimos y personal cercano con los que Letizia no suele coincidir casi nunca. 

Las comidas y escapadas con amigos del rey Felipe VI

A veces es el propio local al que Felipe acude con sus amigos el que, orgulloso, revela sus planes con alguna instantánea con el monarca. Los miembros de la tripulación del Aifos, el velero de la armada cuyo nombre viene del nombre 'Sofía' al revés, tal como informó '¡Hola!', están en su círculo más cercano. Son doce personas las que se encargan de gestionar y cuidar la nave, bajo las órdenes del capitán Jaime Rodríguez-Toubes. De todos ellos, solo uno es una mujer: Natalia Díaz, una suboficial de la Armada. 

Una de las personas más cercanas al rey es Álvaro Fuster, su mejor amigo, además del más longevo. Ambos se conocieron durante su estancia en el colegio de Santa María de los Rosales, donde también han estudiado las hijas del monarca. Un vínculo que ni su título ni la gran atención que atrae su figura ha logrado romper. De hecho, se dice que Fuster fue uno de los primeros en conocer a Letizia y su discreción fue clave para proteger la vida privada del entonces príncipe de Asturias.

Por eso, no es de extrañar que Álvaro fuera uno de los testigos de la boda de los actuales reyes. Esta gran amistad se extendió al hermano de Álvaro, Ricky, con quien el rey ha disfrutado de muchos momentos a lo largo de los años. Otro amigo de la adolescencia es Pedro López Quesada, que también ha acompañado al marido de Letizia en varios planes y está casado con Cristina de Borbón-Dos Sicilias.

El rey Felipe VI acude a comer con unos amigos al restaurante Piú di Prima con unos amigos

El rey también se suele reunir con amigos del ámbito militar, como Beltrán Gómez Acebo, hijo de su tía paterna, la infanta Pilar, a quien esta muy unido. Es el mismo caso que con sus primos por parte de la reina Sofía, como Pablo de Grecia, con quien también mantiene una buena relación. Lamentablemente, los primos no se ven tanto como quisieran ya que el griego vive fuera de España.

Los otros amigos del rey Felipe VI: artistas, deportistas de élite y royals europeos

Otra figura clave en el entorno del padre de la infanta Sofía es el aristócrata Pedro de Borbón Dos-Sicilias, duque de Calabria y Grande de España. Hijo de un Infante de España, Pedro es de la misma edad que Don Felipe y ambos comparten una ascendencia histórica común. Luego estarían sus amigos en las monarquías europeas, como Kyril, príncipe de Bulgaria. Ambos se han mantenido cercanos durante años, especialmente desde su boda con la mallorquina Rosario Nadal.

Por supuesto, están también sus amistades en los círculos de deporte de élite. Es el caso de Fernando León, volcado en las regatas, una pasión muy típica de la familia Borbón. Y otro caso es su vínculo con Jaime Anglada, cantante y pareja artística de Carolina Cerezuela, a quien los reyes han acudido a escuchar en varias ocasiones.

El plan del rey Felipe VI que la reina Letizia no soporta

Hace unos días, Felipe VI ponía rumbo a Baqueira Beret para pasar unos días disfrutando del esquí con unos amigos. Una de sus localizaciones favoritas para practicar este deporte que adora desde que era niño, junto con Sierra Nevada. En esta ocasión, el monarca viajó con cinco amigos que comparten su pasión por esquiar. Tanto en esta ocasión como en otras salidas a la nieve por parte del rey, Doña Letizia no ha querido acompañar a su marido.

El motivo es obvio: la reina Letizia odia esquiar. Cuando los actuales reyes empezaron a salir, ya se pudo intuir que la periodista no era una gran fan de las escapadas a la nieve. Eso sí, ella lo intentó. Tomó clases e intentó encontrarle el gusto a este deporte. Pero, tras mucho probar, no logró disfrutar de la experiencia y desistió. "Si me caigo, me sacaréis, ¿no?", dijo, nerviosa, a los medios en su primera experiencia en 2004. A pesar de su miedo a caerse, la monarca demostró tener un talento natural. Aún así, no es un terreno en el que se sienta cómoda y donde quiera verse con frecuencia.

Tanto es así que las últimas imágenes que tenemos de Letizia sobre unos esquís fue en 2017. En aquel entonces la periodista, Felipe, Leonor y Sofía viajaron hasta la estación de Astún para disfrutar de las bajas temperaturas. A pesar de no gustarle ese deporte, aquel día la reina se mostró feliz y sonriente por poder pasar tiempo con su familia y ver a sus pequeñas descubrir la nieve.

Las fotografías dieron la vuelta al panorama social, no solo por ver a Letizia practicar esquí, sino porque fue una de las primeras veces que vimos a Leonor y Sofía interactuar con sus padres y entre ellas. Por aquel entonces, las jóvenes estaban muy protegidas para garantizar que disfrutaban de una infancia más o menos normal.