Kate Middleton ha dejado claro en alguna ocasión que, antes que princesa, ella es madre. Y también ha dicho que disfruta de lo lindo involucrándose personalmente en los aniversarios de sus hijos. En concreto, cada año, después de dar un beso de buenas noches a sus tres pequeños, suele meterse un rato en la cocina para hornear y decorar una tarta de cumpleaños. O al menos eso es lo que comentó en 2019, durante el especial navideño del programa de cocina de Mary Berry, 'A Berry Royal Christmas'. "Se ha convertido en una especie de tradición lo de quedarme despierta hasta medianoche con cantidades ridículas de mezcla para tartas y glaseado y que me salga demasiado. Pero me encanta", apuntó la princesa consorte.
Durante el verano, Kate pidió consejos y trucos de repostería a la finalista del programa 'Great British Baking Show' Alice Fevronica. También sacó a relucir su afición por las tartas de cumpleaños caseras durante la Gran Fiesta del Té con motivo del 75 cumpleaños del Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés). Tanto es así que Guillermo y ella participaron en un tutorial de postres y ayudaron a decorar magdalenas en ese evento. La clase práctica le sirvió seguramente para preparar la tarta de su hijo Louis, que cumplió seis años la pasada semana, y le ayudará a la hora de organizar el postre de la fiesta de cumpleaños de su hija mediana Charlotte, que este 2 de mayo sopla sus nueve velas.
La tercera en la línea de sucesión al trono británico, Charlotte nació en 2015 en el londinense hospital de St. Mary. Al año siguiente participó en su primera gira real, trasladándose con sus padres hasta Canadá para un viaje de una semana. Después fue matriculada en una escuela religiosa, la Willcocks Nursey School, que sus progenitores eligieron para ella porque pensaron que "sería un primer paso ideal para la educación de Charlotte" y quedaron "impresionados por el equipo que trabaja allí". Tras sus primeros días en ese centro, se dijo que la princesa tenía exquisitos modales, que era una niña tan dulce como segura de sí misma, y que le encantaba charlar —e incluso hablaba algunas palabras en español—.
Un nuevo retrato oficial
En aquella misma época, los príncipes de Gales confesaron que a la pequeña le encantaban el baile, las acrobacias y la cocina, y la reina Isabel II añadió que a Charlotte no le importaba mandar sobre su hermano mayor. Ya durante la pandemia, tanto Charlotte como George fueron educados en casa, donde recibieron clases de sus padres, y parece ser que ambos disfrutan pasando tiempo juntos. "George es más reservado y Charlotte es más extrovertida. Tal vez sea porque él es el heredero y un día podría ser rey", comentó una fuente cercana a la familia real.
Es probable que, ahora que la niña cumple años, Kate vuelva a dar rienda suelta a su fervor por la fotografía. No en vano, la nuera del rey Carlos III retrató hace poco al príncipe Louis y a continuación publicó la imagen en sus redes sociales. "Feliz 6º cumpleaños, príncipe Luis. Gracias por todos los amables deseos de hoy”, reza el mensaje que acompañaba la instantánea —este tipo de retratos solía ser publicado en la víspera, pero en esta ocasión se subió el mismo día del cumpleaños—. La princesa retomaba así su faceta de fotógrafa familiar tras la polémica que protagonizó el pasado 10 de marzo, cuando envió a los medios una foto en la que aparecía acompañada de sus tres retoños con motivo del Día de la Madre, con la intención de acallar los rumores sobre su salud. El gesto no tendría nada de extraordinario de no ser porque rápidamente se descubrió que ella misma había retocado la imagen en Photoshop.
La chapuza provocó que las agencias de comunicación más importantes retiraran la fotografía de sus servidores y que ella se viera obligada a pedir disculpas. Pocos días después, Kate publicó un vídeo en sus redes sociales en el que revelaba que padece cáncer, una enfermedad que le fue detectada tras la cirugía abdominal a la que se sometió a principios de año, y que se está sometiendo a "quimioterapia preventiva", lo que explica por qué sigue retirada de la vida pública. "Han sido un par de meses increíblemente duros para toda la familia, pero he tenido un equipo médico fantástico que me ha cuidado mucho, por lo que estoy muy agradecida", señaló en la mencionada grabación, donde también dejó claro que su marido está siendo para ella "una gran fuente de consuelo y tranquilidad".
Malos tiempos
Desde luego, no corren buenos tiempos para la familia real británica. Por un lado, a la enfermedad de Kate se unen los continuos rumores y habladurías acerca de su matrimonio. En este sentido, son varios los medios que han rescatado aquella historia de 2019 en la que se acusaba al hermano de Harry de haber mantenido un escarceo amoroso con una de las mejores amigas de su esposa, Rose Hanbury, mientras la susodicha estaba embarazada de su tercer vástago.
Por otro, la prensa mundial sigue de cerca la situación de Carlos III, que estos días ha retomado algunas de sus actividades públicas tras una pausa de tres meses para centrarse en el tratamiento de su cáncer, y ha llegado a especular con la posibilidad de que Guillermo acabe renunciando a ser heredero de la corona británica al verse incapaz de lidiar con la presión mediática y las críticas a su escasa actividad pública.