La Casa Real de Noruega, obligada a tomar medidas in extremis sobre Mette-Marit en plena polémica de su hijo, Marius Borg

La Casa Real de Noruega ha emitido un comunicado urgente en el que anuncia medidas in extremis sobre Mette-Marit mientras continúa la polémica de su hijo, Marius Borg

Jara Bravo
Jara Bravo

Redactora digital de Lecturas

Mette-Marit
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Hace ya un tiempo que la Casa Real de Noruega lleva en el centro del foco mediático. La boda de Marta Luisa de Noruega y Durek Verret daba la vuelta al mundo con sus grandes prebodas, la expectación sobre el vestido de la novia y la presencia de la realeza noruega. Pero no todo lo que ha aparecido en la prensa de la familia del rey Harald ha sido positivo. Desde hace varias semanas, la detención y acusaciones a Marius Borg Høiby, hijo de la princesa Mette-Marit, ha generado una gran polémica entorno a la Corona noruega. 

A esta complicada situación se ha sumado un inesperado giro de los acontecimientos. La Casa Real ha emitido un comunicado urgente este viernes, 11 de octubre de 2024, sobre las medidas in extremis que han tenido que tomar sobre la salud de Mette-Marit. "Su Alteza Real la Princesa Heredera Mette-Marit (51 años) ha reiniciado el tratamiento para su enfermedad pulmonar crónica", han informado.

Mette-Marit
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Una noticia muy dura que nadie esperaba después de que la madre de la princesa Ingrid se mantuviera estable, dentro de las posibilidades de esta enfermedad, durante varios años. Era en 2018 cuando la futura reina anunciaba que sufría "una variante inusual de fibrosis pulmonar", una dolencia que se basa en la inflamación, endurecimiento y cicatrización de una parte del tejido pulmonar. Este proceso provoca que la función respiratoria se deteriore de forma lenta, pero progresiva.

"La experiencia anterior ha demostrado que los medicamentos pueden provocar efectos secundarios que pueden tener consecuencias para el programa oficial de la Princesa Heredera. Por lo tanto, nos parece natural compartir esta información esta vez", han explicado desde la Casa Real, asegurando que informarían de cualquier cambio o evolución.

Así, siendo conscientes de que Mette-Marit podría tener que suspender algunos compromisos de su agenda, han preferido mostrarse transparentes sobre este cambio en la salud de la princesa. De hecho, hace apenas un mes, la ausencia de la esposa de Hakoon en un acto provocaba la preocupación de la prensa y los ciudadanos.

La polémica de Marius Borg que ha sacudido la Casa Real de Noruega

Esta recaída de Mette-Marit ha llegado en uno de los momentos más complicados de la Casa Real de Noruega. Marius Borg, primogénito de la princesa fruto de una relación previa a su matrimonio con el príncipe Hakoon, ha sido (por desgracia) de una gran polémica. El pasado agosto, el joven fue detenido tras ser acusado de agredir, física y psicológicamente, a su entonces novia,  Nora Haukland.

Marius Borg de Noruega
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El escándalo fue tal que Marius tuvo que emitir un comunicado explicando su versión de los hechos a través de la web 'NKR'. "El fin de semana pasado sucedió algo que nunca debería haber sucedido. Cometí lesiones corporales y destruí objetos en un apartamento en estado de ebriedad tras haber consumido alcohol y cocaína después de una discusión", reconoció.

Lejos de quedarse ahí, a medida que han pasado las semanas han ido sucediéndose nuevos hechos, como las nuevas acusaciones de maltrato por parte de otra exnovia de Borg, Juliane Snekkestad, las dos detenciones extra por haberse saltado la orden de alejamiento o las llamadas con amenazas del joven. Incluso ha salido a la luz el arresto de un asesino a sueldo que habría seguido a la exnovia del hijo de Mette-Marit. Unas informaciones que han empeorado la situación para la Casa Real de Noruega.

Y, por si esto no fuera suficiente, en los últimos días la Corona noruega ha tenido que salir al paso para desmentir una información sobre la princesa Ingrid Alexandra. El pasado septiembre se informó que la joven iba a prolongar su formación militar de 12 meses a 15. Aunque los motivos para extender este período son muchos y diversos, como necesitar más experiencia o lo feliz que estaba con esta disciplina, se asumió que la verdadera razón era mantener alejada a la futura heredera del escándalo de su hermanastro. Para evitar más especulaciones, la Casa Real noruega negaba tajantemente que la decisión de la joven tuviera nada que ver con este escándalo.

 

La desesperada petición de Mette-Marit ante la polémica de su hijo, Marius Borg

Aunque el protagonista del escándalo era Marius Borg ha sido inevitable que todos los ojos buscaran a Mette-Marit. ¿Qué pensaba la princesa de las acciones de su hijo? ¿Cómo se lo había tomado? ¿Han hablado del tema? Preguntas que no tienen respuesta, ya que tanto la princesa como Hakoon han actuado con mucha discreción. De hecho, salió a la luz que la futura reina había visitado a la presunta víctima de su hijo en secreto.

Lo que sí pudimos saber es la petición que la princesa hizo a la prensa en referencia a toda esta polémica. Fue durante el viaje oficial de la pareja real por el condado de Trøndelag cuando Mette-Marit decidía pronunciarse. Durante algunos de los actos de este recorrido, la prensa le preguntó a la princesa qué opinaban sobre los hechos presuntamente perpetrados por Marius y qué futuro le deparaba.

Mette-Marit y Hakoon
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La nuera de los reyes Harald y Sonia decidía romper su silencio y contestar de forma muy cordial. "Por respeto a todos los implicados, incluido Marius, no quiero decir nada más sobre ese asunto. Les pido su compresión al respecto, por el momento", expresaba la madre de Sverre Magnus. De esta manera, Mette-Marit ha dejado clara su postura que es la que ya se intuía tras sus últimos movimientos: discreción y silencio.