Fue en verano de 1996, cuando Lady Di fue fotografiada durante sus vacaciones. Ella tenía por entonces 36 años, su hijo Guillermo de Gales 14, y las imágenes tomadas la mostraban haciendo topless, unas instantáneas que el periódico inglés Daily Mirror no dudó en publicar rápidamente.
Días más tarde, en un almuerzo juntos, la princesa y Nicholas Coleridge, actual presidente de Conde Nast UK y que publica sus memorias The Glossy Years, charlan sobre las polémicas imágenes. Diana le pregunta si ha visto las fotografías de la polémica, esas en las que aparece desnuda de cintura para arriba.
Pero no fue el único al que le llegaron las fotografías. Los alumnos de Eton, colegio al que asistía entonces el príncipe Guillermo, no tardaron en comentarlas en clase, un tema que fue motivo de burla para el príncipe Guillermo. Lady Di le comentó a su amigo que su hijo "estaba disgustado. Me dijo que los demás chicos se estaban burlando de él, diciéndole que mis tetas son muy pequeñas". Una afirmación a la que el escritor contestó que "sus senos, a pesar de verse borrosos, eran perfectos y que no tenía de qué preocuparse", quitándole hierro al asunto con un poco de humor.
Sin embargo, el joven Guillermo sufrió burlas durante un tiempo. Las polémicas fotos de su madre dieron la vuelta al mundo, algo que para su hijo mayor fue un pequeño infierno.
Y puede que fuera precisamente aquel episodio de su vida el que marcara al príncipe en su futuro. Actualmente, Guillermo y Kate Middleton están implicados activamente en la lucha contra la interacción irresponsable en Internet. Han sido numerosas las ocasiones en las que el royal ha mostrado su apoyo en diferentes casos de bullying o acoso, sobre todo a través de redes sociales. La última iniciativa que ha acaparado su atención ha sido la nueva aplicación de la BBC que alienta a los jóvenes a repensar sus interacciones en Internet.
Ahora preocupados por sus pequeños George, Charlotte y Louis, los Duques de Cambridge continúan trabajando en este aspecto. "Es fantástico que la BBC haya lanzado una aplicación que brindará apoyo a los jóvenes mientras navegan por el mundo digital", aseguraba Guillermo de Gales. "Estoy encantado de ver este resultado positivo y práctico del Grupo de trabajo de la Fundación Real para la prevención del ciberacoso".
No hay duda de que se trata de un tema serio contra el que luchar desde todos los puntos. Tanto dentro como fuera de las escuelas, y que todo apoyo, incluso el de la realeza, es bienvenido para mejorar y solucionar un problema que cada día afecta a miles de niños en el mundo.