Desde la muerte de Isabel II el 8 de septiembre de 2022, la familia Windsor ha hecho frente a un sinfín de polémicas que han ido sorteando como han podido. Las hirientes declaraciones de Harry en su biografía, la mala imagen de Carlos III a consecuencia de los desprecios a los miembros de su equipo o el desencanto de tener a Camilla como Reina de Inglaterra, colocaron a Guillermo y Kate como los claros salvadores de una institución herida.
Si echamos la vista atrás, si hay una persona que ha estado en el ojo del huracán de principio a fin a lo largo de estos meses ha sido el príncipe Guillermo (43 años). Un año terrible para el heredero al trono británico que lejos de mejorar ha ido empeorando más si cabe en los últimos meses con el bache de salud de Kate Middleton y Carlos III. De hecho, hace solo unos días salía a la luz que al margen de su estado físico, la princesa de Gales estaría muy preocupada por cómo todo esto puede afectar a su marido a nivel psicológico.
La supuesta infidelidad de Guillermo a Kate Middleton con Rose Hanbury
Todo comenzó hace justo un año cuando una supuesta crisis entre los príncipes de Gales acaparó los titulares de medio mundo después de un supuesto encuentro en San Valentín entre Guillermo y Rose Hanbury, quien siempre ha sido señalada como amante del heredero. El misterio entorno a la polémica información fue tal que solo unas horas más tarde desapareció de los medios británicos que lo habían sacado a la luz.
Esta velada de la que no hubo prueba gráfica alguna mermó la popularidad de Guillermo. Finalmente, el rumor llegó a su fin y el matrimonio hizo frente a sus compromisos institucionales juntos como si nada fuera con ellos.
Revivir la muerte de su madre en 'The Crown'
La trágica pérdida de Lady Di marcó su vida y la de su hermano para siempre. Convertida en una leyenda, tanto Guillermo como Harry reviven a menudo la muerte de su madre, algo de lo que nunca conseguirán reponerse. "Perder a mi madre, no solo fue doloroso. Fue un dolor como ningún otro", confesaba en un reciente acto público.
Pues bien, el pasado mes de noviembre, Netflix hacía temblar los cimientos del Palacio de Buckingham con la emisión de la sexta temporada de 'The Crown' dedicada a la muerte de Lady Di y su ya conocida por todos enemistad con Isabel II. Esto llevó a Guillermo a revivir de manera inevitable la muerte de su madre.
Los ataques constantes de su hermano Harry
Otro de los temas que ha supuesto un verdadero quebradero de cabeza para Guillermo es la ruptura definitiva con su hermano Harry. Sus últimas declaraciones en la biografía 'Spare' crearon una grieta insalvable entre ellos. El duque de Sussex hizo público que Guillermo le pegó y en medio de una discusión calificó a Meghan Markle de "difícil, grosera y abrasiva". La cosa no se quedaba ahí, el joven señaló a los príncipes de Gales de filtrar información a la prensa para ir en su contra. A pesar del ruido que se creó entorno a ellos, la respuesta desde Kensington Palace fue el silencio... Sin embargo, no podemos obviar que volvió a afectar la reputación (casi) impoluta del heredero al trono.
La misteriosa enfermedad de Kate Middleton
Cuando parecía que todo volvía a la calma y después de una Navidad aparentemente normal junto a toda la familia, el pasado 16 de enero, un comunicado oficial anunciaba que Kate Middleton había tenido que pasar por quirófano. Sin más detalles que "operación abdominal", Guillermo comunicaba que cancelaría sus compromisos oficiales hasta que su mujer se recuperara por completo porque era su "máxima prioridad". Así, durante las dos semanas que la princesa de Gales permaneció en el hospital, fue su marido quien estuvo pendiente de los cuidados de su mujer y sus tres hijos.
El cáncer de su padre, Carlos III, el golpe definitivo
Lamentablemente, los planes de Guillermo de estar al lado de su mujer durante su convalecencia se vieron truncados cuando Carlos III anunció que padecía cáncer y debía someterse de forma inminente a un tratamiento que le mantendría lejos de la vida pública durante varios meses. Un duro varapalo para toda la familia que le han obligado a ponerse al frente de la Corona británica junto a Camilla Parker.