La Casa Real de Mónaco sigue expectante debido al estado de salud de Charlene. La mujer del príncipe Alberto, tras pasar por segunda vez por quirófano, fue ingresada el pasado uno de septiembre y el misterio en torno a este nuevo bache ya ha sido descifrado. Desde el Principado, se ha emitido un comunicado para aclarar todo el revuelo causado: "Fue llevada al hospital después de desmayarse debido a complicaciones de una infección otorrinolaringológica grave", se puede leer en el texto remarcando que la Casa Real, a pesar de la distancia, sigue de cerca todas y cada una de las novedades. Por su parte, Alberto continúa con sus responsabilidades con la Corona y su agenda oficial no le da tregua. Después de haber viajado a Sudáfrica para reencontrarse con su mujer tras meses separados, ahora ha aterrizado en Irlanda con sus hijos, Jacques y Gabriella.
Septiembre viene cargado de trabajo y Alberto de Mónaco no ha dudado ni un segundo en llevarse a sus mellizos durante su visita al Trinity College de Irlanda. Como actual príncipe soberano, el marido de Charlene ha tomado la decisión de donar un millón de euros para restauración de la Antigua Biblioteca de la universidad de Dublín, un gesto con el que se siente realmente orgulloso y con el que ha honrado a su madre, Grace Kelly: "Es un gran placer para mí seguir los pasos de mi madre, que tenía un profundo afecto por esta tierra", ha declarado públicamente, unas palabras recogidas por el Irish Times.
El príncipe Alberto tiene siempre en sus pensamientos a la exnadadora pero, tal y como han informado desde Casa Real, su estado a día de hoy "no es preocupante". Como padre de familia, sus hijos son su máxima prioridad y los pequeños se han convertido en su mejor compañía durante esta intensa jornada de trabajo. Además, el encuentro de la familia en Sudáfrica ha sido la mejor medicina para Charlene y su vuelta a Palacio es está más cerca que nunca: "Está lista para volver", confesaba recientemente el hermano de Estefanía de Mónaco, ansioso e impaciente por el regreso al Principado de la madre de sus hijos.
Abrazos, mimos, carantoñas... Alberto y Charlene derrocharon pasión y zanjaron de una vez por todas los rumores que afirman que su matrimonio está completamente roto: "Alberto es el principal motor de mi vida y mi fuerza, sin su amor y apoyo no habría podido superar ese momento tan doloroso"... ¿Quién dijo crisis?