Carmen Borrego está viviendo un complicado momento en su vida. La hija de María Teresa Campos está desolada tras haber dado por segunda vez positivo en coronavirus. Muy decaída y físicamente afectada por la dureza del virus, el confinamiento le está pasando mucha factura a la colaboradora de televisión. “Afortunadamente estoy bien. No he estado en una fase grave pero el aislamiento me mata. Llevo 17 días sin salir de la habitación y ya empiezo a volverme loca”, ha confesado en exclusiva para Lecturas. Además del aislamiento y la preocupación lógica de su estado de salud, hay otra cosa que tampoco se puede quitar de la cabeza...