Carlota Corredera (48 años) estuvo el lunes por la noche en el programa ‘Gente Maravillosa’ de la televisión canaria. La presentadora llevaba tiempo alejada de la televisión, así que se mostró de lo más emocionada al volver a sentarse frente a las cámaras. Esta vez lo hizo como invitada. La gallega fue a este espacio para tratar diferentes cuestiones de su vida. Entre ellas, la de los haters de las redes sociales. Carlota hizo mención a los comentarios negativos repletos de críticas e insultos que ha recibido en los últimos años, y se abrió en canal al explicar cómo los gestiona.
Los desagradables insultos que ha recibido Carlota Corredera
Carlota Corredera quiso visibilizar lo que conlleva ser un rostro conocido a la hora de recibir según qué comentarios. La presentadora aseguró que entiende que la gente opine de su trabajo al ser una persona popular. Pero denunció que hay límites que no se pueden pasar. Límites que con ella han llegado más de una vez al insulto. Carlota recordó que “me han acatado por adelgazar, por gorda, por feminista, por el hecho de que me llegue el éxito a los 40 años…”. Unas palabras con las que se remontó a algunos de los momentos más difíciles de gestionar para ella. Gestión que hace yendo a terapia para así cuidar de su salud mental.
Carlota Corredera habla de la terapia psicológica
Carlota Corredera no tuvo ningún problema en contar en ‘Gente maravillosa’ la importancia de acudir a la consulta del psicólogo. “Voy a terapia todas semanas porque gestionar lo que es estar arriba y abajo, es difícil por mucha fortaleza mental que una tenga”, dijo la presentadora sobre otro de los motivos por los que acude al psicólogo para cuidar su mente. Si de algo se alegra en gran parte la gallega es de que los momentos difíciles de gestionar le hayan llegado con cierta madurez.
La presentadora hizo ayer por la noche una reflexión con la que dijo que “a mí esto me ha pillado con unos años. Con una madurez y unos años que una ya viene con un camino recorrido….”. Y dejó claro que “si a mí esto me llega a pasar con 20 años, pues quizás hubiese tenido un final muy feo”.