Camilo Sesto ha vuelto para despedirse y rodeado de polémica. El martes presentó en el emblemático Florida Park de Madrid 'Camilo Sinfónico', su último trabajo, además de un documental que recoge algunos de los momentos cumbres del artista de Alcoy. Después de posar para los medios gráficos, se negó a dar declaraciones a la prensa allí congregada.
Saludó, lanzó besos y no dejó de sonreír, pero Camilo Sesto, a pesar de que en la convocatoria se asegura que iba a dar declaraciones, permaneció en silencio. Posó durante algo más de tres minutos, primero solo y luego en compañía de Mónica Naranjo, Ruth Lorenzo, Marta Sánchez y Pastora Soler, que colaboran en este último trabajo, y se marchó. ¿A qué venía esa reacción? Nadie se lo podía explicar, así que varios medios se saltaron el cordón de seguridad para preguntarle por su estado de salud. “Estoy bien, un poco mareado, gracias”, respondió lacónico el intérprete de Amor Amar.
La salud del cantante preocupa y, aunque Pastora Soler tranquilizó a la prensa y comentó que Camilo ha trabajo muy duro en el proyecto, su reacción no han hecho más que saltar la alarmas.
Camilo Sesto sufrió una caída en 2016, se fracturó la cadena y el pie y tuvo que pasar por el quirófano que le dejaron sin fuerza y casi sin masa muscular en el pie. Además a finales de julio tuvo otro problema de salud, cólico-renoureteral, y estuvo ingresado en un conocido hospital de Madrid.