Tras batirse contra Manuel González, Makoke y Nieves Fit, Ángela Ponce (34 años) se convirtió en la segunda expulsada de 'Supervivientes 2025'. "A mí nunca me han salvado en un reality de los que he participado, así que por estadística creía que me iba. Me siento muy afortunada de poder vivir esto y sabe que puedo sobrevivir, me he superado", dijo la miss España antes de coger la barca que la llevaría al hotel antes marcharse de Honduras.
La modelo, feliz de haberse sido expulsada del concurso de supervivencia más extremo de la televisión, se ha enfrentado como ya hicieron Terelu Campos y Samya al espejo del programa. Sin duchar ni descansar todavía, la ya exconcursante ha podido ver su reflejo por primera vez y su reacción ha sido realmente brutal. Y es que tras más de un mes en la isla comiendo pescado y arroz su aspecto no era el que ella recordaba. "¡Mis piernas! Ay, Dios. ¡Madre mía!", comenzaba diciendo.
"La cinturita. ¡Ostras! La cintura esta no la tenía ni para Miss Universo. Estoy flipando, pero sobre todo con mi cara. La tengo súper chupada. El pómulo... Me veo muy guapa de ojos pero me veo a la vez muy consumida", ha reconocido Ángela. "Lo que flipo mucho es con las picaduras. Tengo las piernas llenas, también de moratones y rozaduras", ha añadido.
Pero esta no ha sido su única reacción. Ángela ha podido darse su primera ducha después de semanas lavándose con una pequeña pastilla de jabón, sin casi champú y con el agua del mar: "¡Buah, una ducha, qué fuerte! Agua sin arena. Dan ganas hasta de comerse el jabón de lo bien que huele. Llevo sin oler así un mes. Y el agua caliente. Esta es la ducha que más he disfruta en la vida. Qué ganas de sentirse limpia y quitarme la tierra. Uno de los placeres de la vida que no nos damos cuenta".

Ángela Ponce en su primera ducha tras ser expulsada.
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Tras el espejo y este baño tan especial, la modelo también ha podido además darse un suculento banquete en el que había hamburguesa, pizza, huevos con patatas y lomos, perritos calientes, limonada, zumo y fruta fresca recién cortada. "¡Qué bien huele! Ostras, qué fuerte", ha dicho llevándose las manos a la cabeza y totalmente sorprendida. "¿No hay tiempo no?", ha preguntado a la organización mientras probaba una de las elaboraciones.
"He soñado con este momento todos y cada uno de los días dentro de la isla. Literalmente por la noche cierras los ojos y piensas en comida. El 95% de las conversaciones es sobre comida. Compartiría esta cena con Nieves porque ha sido mi hermana aquí y desde el minuto cero. Y si pudiera también le daría a Manuel. Esto es un sueño, de verdad. Un mes. Se me había olvidado el sabor del kétchup. Soñaba con él", ha expresado Ponce mientras devoraba "la mejor hamburguesa del mundo".
Ángela además se ha atrevido a contestar a la pregunta de 'Supervivientes 2025' sobre con quién no le gustaría compartir esta cena: "Con Damián porque la información que Makoke nos dio de que él no había dado pizza a ninguno del grupo haría que yo no lo compartiera con él. Además no hemos hablado mucho en la isla. "Os juro que está siendo la mejor cena de mi vida. La fruta no la quiero, quiero dulce. Quiero azúcar", ha dicho antes de terminar esa comilona y regresar a nuestro país definitivamente.