Las normas están para saltárselas. Eso mismo debió pensar Carla Barber en la boda de Pilar Rubio y Sergio Ramos. Las indicaciones estaban claras para los invitados: nada de móviles ni cámaras y la seguridad era estricta, estos deberían dejarse al acceder a la celebración. Pero la médica estética y Miss España 2015 las burló a su manera no una, sino dos veces.
"Parada en boxes", retransmitía desde el guardarropa de la finca La Alegría SR4 con un selfie en vídeo en el que se avistaban los enseres de los casi 500 invitados. Y abandonaba el móvil allí mismo durante horas, con el del resto de los allí presentes, para hacer una segunda ronda ya entrada la mañana.
Se despedía de la finca y de la experiencia por todo lo alto que los "#Unicornios Pilar & Sergio" habían montado enseñando, de nuevo, otro pedacito de la tierra prohibida, el mural de entrada. Y aprovechaba la grabación para justificar que su comportamiento estaba dentro de la norma (aunque muy al límite): "sí está permitido grabar en boxes", explicaba. Si a los novios les ha hecho más o menos gracias está por ver.