En 2014 la vida de Bimba Bosé pegó un frenazo. Le acababan de detectar un cáncer de mama, por el que le extirparon uno de los pechos. Recibió tratamiento de quimioterapia y aún a día de hoy continúa librando la lucha contra las células cancerígenas. “Esto va para largo”, ha dicho en un evento de una marca de coches, “yo estoy bien y desde que me lo diagnosticaron me lo tomé bien. Prefiero tomármelo así. Hay que ser optimistas”.
La modelo ha aclarado las últimas informaciones que se habían publicado sobre ella en las que se hablaba de una posible recaída. La artista y modelo ha hablado en EXCLUSIVA con LECTURAS. Bimba ha matizado que no ha recaído, porque no se había recuperado por completo, y nos ha revelado la naturaleza de su enfermedad: metástasis en huesos, hígado y cerebro. Como se encuentra ya disfrutando del verano en Sotogrande y en familia, lleva un par de semanas de vacaciones con sus niñas, lo que le ha hecho estar muy desconectada de lo que se publicaba sobre ella. Lo que sí está claro es que ella continúa luchando, probando tratamientos que le van funcionando y se plantea día a día la vida, siempre buscando el apoyo y la fuerza de su círculo íntimo: su pareja Charlie, sus hijas y sus amigos.
"Tengo metástasis en huesos, hígado y cerebro"
-¿Cuando te han vuelto a dar esta noticia?
-¿Qué noticia? Estáis todos muy equivocados. No es así. Ese es el problema. Siempre he tenido cáncer desde hace dos años, no os enteráis de nada. Me veis bien y pensáis que estoy curada. La gente es boba, pero una se pone de los nervios. Estáis haciendo daño a mi entorno. A mí me da igual, porque me defiendo, pero mis hijas mis amigos, ven una noticia así y, mira, me cago en todos sus muertos. Me parece una falta de respeto. Me enteré porque me llamaron por teléfono: "Oye, ¿tienes cáncer?" Oye, pues sí. A mí me hace gracia, porque me dijo la periodista que publicó esta información: "¿Quieres contar algo?". "No, quiero que respetes mi intimidad", fue lo que le contesté a la periodista. Y parece que no dijo eso, porque yo no lo he leído.
-No sabía que fuera así, pensaba que lo habías comunicado tú, porque son cosas que debe contar la persona que tiene la enfermedad, en este caso tú.
-No tengo que hablar si yo no quiero hablar. Eso es lo que yo digo. ¿Por qué tienen que hablar otros? Yo ya dije hace dos años que tenía cáncer cuando me lo diagnosticaron y nunca dije que estuviera curada. Que tú me veas bien por fuera no quiere decir ni significa que por dentro esté bien.
-¿Estás intentando recuperarte?
-Claro, y siempre he dicho eso. Estoy en tratamiento constante desde entonces.
-¿Te dan quimio y radio?
-Quimio hice, radio no, porque no funcionó, y voy pasando de tratamiento en tratamiento, según van funcionando.
-¿Lo tienes localizado?
-Metástasis en huesos, hígado y cerebro.
-Y, Bimba, ¿retirarte a Cádiz ha sido por eso?
-No me he retirado. Me he mudado, porque Madrid no cumple las expectativas que yo necesito para vivir.
-¿Es menos tóxico que Madrid?
-Madrid es enervante. Se ha convertido en una ciudad muy 'bicimad' para niños y para mayores. Incómoda y cara para mi tipo de vida.
-¿Os habéis trasladado todos?
-Estamos todos allí.
-Las dos niñas y Charlie, ¿no?
-Que es como otro más.
-¿Cómo es tu vida allí?
-Pues como era aquí, una vida tranquila, la vida normal de una madre con niños. Lo que hacia aquí en Madrid y luego hago mis trabajitos. Voy a pinchar de tarde, no de noche. Voy adaptando mi vida y mi trabajo.
Se da una especie de coincidencia cósmica con muy poca gracia, pues tanto ella como su mejor amigo y diseñador, David Delfín, están viviendo a la vez la misma situación, aunque la enfermedad de cada uno es muy diferente. “Estamos en esto los dos. Siempre trato de echar una mano en todo lo que puedo. Él también es muy optimista. Hemos pasado por tanto juntos… y ahora una cosa más”.
Los dos comparten la misma forma de afrontar la enfermedad, de una manera valiente, decidida y con un optimismo inquebrantable.
-David [Delfín] y tú, los dos con cáncer. ¿Habéis pensado en por qué?
-El cáncer es una casualidad: todos estamos expuestos a lo mismo. No tiene nada que ver. David tiene un cáncer muy distinto al mío. Y se desarrollan por cosas muy variadas y motivos. Bajada de defensas, inmunodeficiencias, inmunodeficiencias emocionales también, porque tiene que ver con lo emocional, el estrés... Y yo siempre me he cuidado un montón. Mucho. Dices, ¡coño!, sigues cuidándote porque, quizás, gracias a haberme cuidado, estoy mejor.
-¿En quién te apoyas, Bimba?
-En mi pareja, que es el que está mano a mano conmigo, y de mis hijos, porque son los más cercanos. El resto, polulamos por el mundo. Mi hermano está por ahí, mi madre por allá. No paramos y, al final, el grupo fundamental es mi pareja, mis hijos y mis amigos.
-¿Sigues trabajando? ¿Todo lo mantienes igual?
-Seguimos trabajando. ¿Si no como sobrevives? Y yo no sé hacer otra cosa.
-La carrera solidaria Land Rover Discovery Challenge es de valientes y repites...
-Fue lo más. Me lo pase pipa. Me ha costado arrancarme, porque estaba muy a gusto con mis hijas en mi casa, y me he venido sin tener nada organizado. Charlie estaba trabajando, todo el mundo trabajando, menos yo que estaba de relax.
-Es un reto, una demostración de que se puede, estando enferma, ¿verdad?
-Eso no es un reto. No lo veo así. Es algo personal. Es vivir una aventura.