Belén Rodríguez sentencia a Antonio David Flores y Olga Moreno: "Su matrimonio está roto y él la ha utilizado"

En el papel que se había reservado Belén Rodríguez, ha sido fundamental como azote de Antonio David Flores. Con la precisión de un médico cirujano, disecciona su personalidad y también la de su mujer, Olga Moreno. Ninguno de los dos sale bien parado a la hora de emitir juicio.

La experiencia narrada de Rocío Carrasco en la docuserie 'Rocío, contar la verdad para seguir viva' es escalofriante cada semana que avanza y ha causado un auténtico terremoto en el hogar de Antonio David Flores y Olga Moreno y, especialmente, en la vida de su hija, Rocío Flores.

Enrocados, lejos de llegar una profunda reflexión por su parte, están poniendo de manifiesto una gran resistencia, poniendo en cuestión su testimonio e intentando desviar la atención del terrible relato de malos tratos que constituye.

Olga Moreno se encuentra estas semanas en 'Supervivientes 2021'. La separa un océano del ojo del huracán, pero no deja de dejarse arrastrar por su fuerza destructiva, tomando partido y manifestándose abiertamente sobre el conflicto familiar. Para Belén Rodríguez, su función en toda esta historia viene condicionada por el papel que le ha otorgado su marido, persona que ha controlado el relato hasta hace poco, en este gran 'acting' de años: "Antonio David ha utilizado a Olga en su papel de buena madre en contraposición a Rocío".

La periodista incide, durante su conversación con Jorge Javier Vázquez para Lecturas, en las numerosas incógnitas que sobrevuelan precisamente sobre ellos. ¿Es tan fuerte el vínculo entre ellos? Si bien, soportaron las infidelidades del excolaborador de 'Sálvame' pero, ¿aguantará la presión mediática actual cuando Olga vuelva de Honduras? 

Su predicción es potente, aguda, pero la cuestión que más le interesa es cómo Olga Moreno afrontará su vida en caso de que se cumplan sus pronósticos. Casi como un deseo, concluye: "Ella va a tener tiempo para pensar". Un proceso que se antoja vital y necesario en unas circunstancias tan delicadas como las que unen las vidas, para bien y para mal, de sus protagonistas.