Si hay alguien que merece un buen año, esa es Belén Roca. La extronista ha pasado por algunos de los momentos más duros a los que puede enfrentarse cualquiera. Duras pérdidas familiares que hicieron que no pudiese levantar cabeza. Primero fue su novio, el desaparecido piloto Dani Rivas, luego su madre y, por último, también perdió la custodia de su hija. Ahora, Belén trata de sonreír y recuperar el tiempo perdido. Poco a poco, lo va consiguiendo...
Una imagen que nos ha alegrado mucho. Belén Roca ha disfrutado de una de las bodas más especiales, la de su hermana Carmen, junto a la persona que más quiere, su hija. Una ocasión única en la que la extronista ha recuperado la ilusión y la felicidad después de tiempos muy duros. “Por fin podemos descansar hermanita”, escribía en su perfil de instagram. “Han sido unas semanas estresantes, pero el resultado ha sido una ceremonia preciosa, llena de muchas risas”.
Roca se ha volcado, como siempre, en su familia. Carmen ha sido uno de los grandes apoyos de la extronista a lo largo de estos complicados meses. Era ella la encargada de narrar cómo se encontraba su hermana tras el accidente que acabó con la vida de Dani Rivas. Una tragedia que iba a sumarse a la que, poco tiempo después, tenían que superar unidas. Su madre fallecía víctima de un cáncer. La extronista se hundía.
Ahora, la vida empieza a recuperar su camino. Poco a poco, Belén ha ido acostumbrándose a su situación actual. No es la mejor pero a todo hay que sacarle la parte más positiva -por mucho que cueste-. Ojalá sea este el principio de un final feliz. Por lo pronto, Belén ha podido pasar un día especial junto a su hermana y su hija. ¡El primero de los que vendrán! “Que Dios os bendiga en este nuevo camino de felicidad”, le desea a su hermana. Seguro que también le toca un poquito.