Belén Esteban está que tira la casa por la ventana. A pesar de que la colaboradora de Sálvame se encuentra en el ojo del huracán tras la polémica boda de Anabel Pantoja y Omar Sánchez en La Graciosa, no puede contener la emoción al ser consciente de que Los sabores de la Esteban no dejan de crecer. Hace apenas unos meses, la de Paracuellos del Jarama decidió apostar por un nuevo negocio gastronómico fuera de la televisión. Su gazpacho y salmorejo se han convertido en una auténtica revolución entre las celebrities pese a que la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) no le ha dado una buena valoración y sitúa estos alimentos en la parte baja de la tabla. A pese de todo, la colaboradora ha decidido apostar por otros dos productos para intentar salvar su futuro como empresaria. Eso sí, la polémica le sigue rodeando...
Belén Esteban no se lo ha pensado dos veces y ha querido seguir expandiendo su negocio. Pero, ¿cómo surgió esta idea? Ella misma lo ha contado en una rueda de prensa: "Cuando pasó lo de las patatas fritas, estaba tomando el aperitivo en casa con mi marido y unos amigos. Quería sacar una patata muy seleccionada, hecha en sartén, no voy a decir el truco, solo que está cortada muy fina. Estamos muy contentos", ha confesado. La colaboradora amplía su catálogo de productos pese a las malas valoraciones que ha recibido por parte de la OCU.
Belén ha intentado callar las malas críticas en su gran día pero estas han aparecido. "No voy a hablar de la OCU...", intentaba la colaboradora. Para Belén Esteban esto ha sido un mazazo. Sus productos se han vendido bien pero no contar con la aprobación de los expertos pone su futuro en entredicho. Rodeada por la polémica, la colaboradora ha tenido que terminar pronunciándose. Dale al play y escucha sus palabras acerca del futuro de su negocio.
Además, Belén tampoco ha querido manifestarse sobre el enlace de Anabel, que tantas ampollas ha levantado, y la próxima visita a Cantora que Kiko Rivera e Irene Rosales están preparando para hablar con Isabel Pantoja. La tertuliana prefiere mantenerse en un segundo plano y enfocar todos sus esfuerzos en su trabajo como empresaria. El único objetivo de Belén es que sus productos tengan una buena acogida y que su faceta televisiva no interfiera en absoluto.