Este viernes 11 de enero, 'Sálvame' y 'Todo es mentira' han hecho una traspaso de colaboradores en directo. En terreno neutral, entre ambos platós, Carlota Corredera ha entregado a Risto Mejide a su compañera Belén Esteban. La princesa del pueblo ha sido la invitada estrella del programa de Cuatro y ha compartido con el presentador confidencias relacionadas con su boda.
Belén se casa el próximo 22 de junio con el hombre de su vida, Miguel Marcos, tal como desveló en exclusiva en Lecturas. La tertuliana ha ido desgranando detalles de la que está llamada a ser la boda del año. La fecha se va acercando y, a solo cinco meses de que se den el 'sí, quiero', Esteban ya ha confirmado que lo tiene pensados y organizados hasta el último detalle.
Uno de ellos, las invitaciones, posiblemente, el tema que más controversias y preguntas ha generado alrededor del enlace. Desde su programa, se ha debatido largo y tendido sobre este aspecto, intentando adivinar quiénes estarán entre los asistentes y cuántos de ellos forman parte del plantel de tertulianos.
La incógnita está a punto de despejarse, tal como se desprende de la conversación que ha mantenido con Risto. "El mes que viene empiezo a enviar las invitaciones", ha afirmado la colaboradora televisiva.
Esteban Menéndez, que contará con Raúl Prieto como padrino de boda, desvelaba recientemente en directo que va a tener diez testigos para que den fe en la ceremonia. Entre ellos, Gema López, Antonio Rossi, María Patiño, y su amigo Rubén. Asimismo, a quienes también les va a llegar la invitación en unas semanas serán Kiko Hernández, Mila Ximénez, Chelo García Cortés, Lydia Lozano y, por supuesto, Jorge Javier, Carlota Corredera y sus amigas Tina y Mariví.
En tono distendido, Mejide se ha querido asegurar que va a recibir la suya, y bromeaba: "Oye, Belén, no sé si sabes que me he cambiado de casa, por si me has enviado la invitación y no me ha llegado...". "¿Pero tú quieres venir a mi boda?", le preguntaba divertida. Y siguiendo con la guasa, el presentador afirmaba: "Mujer, quizás ser testigo es demasiado porque no hay suficiente confianza, pero sí invitado". Desafiante, pero siempre en el mismo tono, Belén zanjaba: "Para ser testigo hay que currárselo".
Otro de los detalles que han tratado ha sido la despedida de soltera que le espera a la colaboradora televisiva, pero reconoce que todavía no tiene ni idea de cuándo ni cómo va a ser.