La semana de Belén Esteban ha sido muy dura. La colaboradora de Sálvame ha tenido que dar explicaciones sobre su enfrentamiento con Anabel Pantoja por motivo de sus líneas de joyas: "Yo sé que ella me quiere pero en ese momento ha sido egoísta". A raíz de esto, la ganadora de Gran Hermano VIP 3 ha tomado una durísima determinación que afecta directamente a sus negocios: ha dejado la marca con la que estaba colaborando mano a mano ya que "quiere trabajar con gente seria". Pero este mazazo empresarial no la va a frenar, ni mucho menos. Belén se ha puesto manos a la obra y quiere aprovechar su éxito como influencer para dar visibilidad a un tema muy preocupante: la irresponsabilidad frente a la Covid-19.
Sí, Belén Esteban está harta de que la gente se salte las normas y pongan en peligro sus vidas y las de los demás. Por esa razón, y a través de sus 'stories', ha anunciado lo que va a hacer a partir de ahora sin cortarse ni un pelo.
"Voy a empezar a publicar todo lo que vea relacionado con fiestas ilegales. Vergüenza os tendría que dar", ha comenzado diciendo Belén Esteban de lo más furiosa. Tras esto, no ha dejado de compartir vídeos en los que varios jóvenes disfrutan de fiestas sin ningún tipo de medida de seguridad y sin mantener la distancia de seguridad.
"Basta ya de fiestas ilegales. Está muriendo mucha gente. Nos lo podemos tomar ya en serio", continuaba sin dar crédito a todo lo que estaba viendo.
Belén Esteban siempre ha estado muy concienciada con todas y cada una de las medidas que se tienen que llevar a cabo para frenar la ola de contagios del coronavirus y no entiende como existen personas tan inconscientes por el mundo. Su compañero de trabajo, Miguel Frigenti, ha decidido seguir sus pasos y ha emprendido medidas legales tras sufrir serias amenazas.
"Después de denunciar públicamente que en una fiesta no se cumplían las medidas de seguridad, he recibido una serie de mensajes, la verdad muy desagradables, con amenazas... Bueno, aunque de normal paso de estas cosas, cuando hay amenazas creo que no hay que tolerarlo ni consentirlo. El hecho de salir en televisión y ser una figura pública no le da derecho a nadie a amenazarte. He decidido ir a la comisaría y poner una denuncia", ha confirmado el periodista públicamente antes de sacar a la luz los audios amenazantes que ha recibido durante el día.