El cantante Al Bano Carrisi vivió ayer viernes una de las jornadas más angustiosas de su vida. El intérprete y compositor sufrió en un corto período de tiempo dos ataques al corazón. En menos de dos horas, tuvo dos episodios en los que sintió una fuerte presión en el pecho. Y lo vivió trabajando, pues se encontraba preparando los últimos detalles del concierto de Navidad en el Auditorio Conciliazione de Roma, todo un acontecimiento musical de estas fechas en la capital italiana y que se celebra muy próximo a la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.
Después del primer examen de su estado de salud, se le decidió trasladar al hospital y, para evitar un riesgo mayor o nuevas repeticiones de infarto, el cantante acabó pasando por quirófano esta noche del sábado al domingo para ser operado del corazón. El propio Al Bano, para tranquilizar a sus seguidores, ha hablado ya con los medios y ha asegurado que se encuentra ya "bien", con el sentido del humor intacto y con muchas ganas de volver a su agenda de actividades. Durante la intervención, que duró 3 horas, estuvo en estado de semisedación y se enteraba "de todo lo que decían los médicos" y, a pesar la gravedad de la situación, el cantante ha comentado que le ha costado reprimir ponerse a hacer bromas: "Quería hacer bromas, pero me he tenido que morder la lengua, porque quizás era mejor no distraerles".
Pasado ya el susto, el cantante deberá pasar unos días ingresado bajo observación, aunque confía en que serán "solo un par de días, porque tengo cosas que hacer". Nos alegramos de que el ánimo de la expareja sentimental y profesional de Romina Power tenga el ánimo arriba y esperamos que tenga una rápida recuperación.
El pasado septiembre Romina y Al Bano celebraban la boda de su hija Cristel. A finales de noviembre, la hija de Tyron Power era noticia por haberse enamorado de nuevo y haber rehecho su vida al lado de Brian Sweeney, un productor de Hollywood con el que llevaría saliendo desde hace cuatro años.