Trata de mantenerse fuerte ante la situación pero resulta imposible no empatizar con Aurah Ruiz y el sufrimiento que vive por su hijo. El pequeño nació con una enfermedad que le provoca constantes bajadas de azúcar y debe acudir diariamente al hospital para estar controlado. Una atención de 24 horas al día que no solo desespera a su madre -el bebé pasa por momentos verdaderamente críticos-, sino también a todos los que han hecho de la causa de Nyan la suya propia. Mientras tanto, el padre, el futbolista Jesé Rodríguez, se centra en sus dos hijos mayores...
Muchos meses de especulaciones terminaban por deseo de Aurah Ruiz. La extronista se sinceraba con sus seguidores y accedía a responder la pregunta que más veces deben haberle formulado: '¿Qué le ocurre a tu hijo?'. El pequeño, fruto de su relación con el futbolista Jesé Rodríguez, llegaba a este mundo aquejado de una enfermedad que le obligaba a permanecer ingresado durante los diez primeros meses de vida. Un sufrimiento que se mitigaba con el alta hospitalaria pero que ha continuado una vez instalado en casa.
El pequeño padece una enfermedad que le provoca constantes bajadas de azúcar. “No es diabetes”, especificaba Aurah. “Su enfermedad es mucho más compleja, mucho más grave. Una enfermedad sin cura y que vive y vivirá siempre con nosotros”. El panorama no era nada esperanzador para el bebé pero madre e hijo luchan como nadie. Ruiz acude diariamente con su hijo al hospital para que le controlen el azúcar y puedan intervenir en caso de que así lo necesite.
La desesperación, viendo pasar la vida del pequeño con tanto sufrimiento, es más que lógica. En una de sus últimas situaciones críticas, Aurah se encomendaba a Dios para acabar con todo esto. “Me pregunto dónde está Dios”, escribía en su perfil de instagram. “Necesitamos un milagro”. Imposible no sentirse cerca de una madre que tan solo quiere ver a su hijo feliz y disfrutando como el resto de niños.
Mientras tanto, Jesé Rodríguez...
Lejos de mostrar preocupación pública por su hijo pequeño, el futbolista prefiere dedicarse a promocionar su faceta musical y felicitar a su hijo mayor por haber cumplido seis años. A diferencia de la relación con Aurah, su entendimiento con Melody Santana, madre de sus dos hijos mayores, es mucho más fluida -no falta quién afirma que han retomando su romance-. Un agravio comparativo que no le deja en muy buen lugar.